Quiero saber con precisión de estrella,
con esa precisión de tu mirada sobre mis poros,
hasta los más recónditos, el número de giros que la tierra ha dado sobre sí
desde aquel seis de junio de mil novecientos sesenta y dos...
(Eran las cinco de la tarde, dicen,Pero es inútil semejante cuenta.
aunque esperé primero a que un pariente,
por fin,
abanadonara el piso tenue
y decidiera tomar el autobús
para llegar al pueblo y no creer,
cuando escuchó a mi abuelo proclamando
que otro nieto acababa de nacer,
-el quinto nieto, quien rompió aquel dicho-.
¿Existe la palabra que defina
la actitud de mi madre aquella tarde
mientras un té anodino y unas pastas
ocupaban, quizá, la mesa inglesa
de la reina Isabel?)
Mañana habría que añadir un dígito,
muesca de muerto en un revólver viejo…
y así cada jornada,
mientras vuestras miradas acaricien
la piel y los latidos de estos versos...
Cuando tus ojos lean estas letras,
¿cuántos dígitos más elevarán
la cuenta desde hoy, seis
de noviembre de este dos mil diez*?
(¿Serviría si en voz alta dijera,La pregunta que hoy importa,
como el graznido torpe de una urraca,
que han sido diecisiete mil seiscientos
setenta y nueve,aproximadamente?
¿Pero eso importa a alguien?)
cuando la luz cimbrea la mañana
sobre mis hipermétropes pupilas,
absortas en velar el crecimiento
del aroma de la hierba,
la pregunta que importará mañana,
cuando ya la chopera sólo sea
un esqueleto oscuro entre la bruma,
la pregunta que ayer nos importaba,
cuando el río sonaba a sed y a miedo,
era saber, como lo sabe un niño
¿cuántos de aquellos giros suponían
impulsos contra el odio y la mentira?
¿Y cuántos contra el olvido?
¿Y cuántos contra el dolor?
¿Cuántos se lubricaron con aceite
de lágrimas compasivas?
¿Cuántas vueltas podrían olvidarse...?
¿Mejor: cuántas deberían
quemarse en crematorios de miserias?
_____________________________________
* Fecha precisa de la escritura del poema
13 comentarios:
Contra el odio y la mentira, contra el olvido, contra el dolor, esas son los giros de la tierra que verdaderamente hay que contar pero...
Los diecisiete mil setecientos setenta y nueve giros que la tierra ha dado desde que tu madre posó su mirada sobre los poros de tu piel de quinto hijo, de hijo varón, de hijo... no son nada baladí, teniendo en cuenta las letras surgidas de aquellos deditos, convertidos hoy en plumas, que desde entonces han incrementado el patrimonio de la belleza de este mundo.
*******************
Gracias Amando por la belleza de estas lineas que abarcan tantas ideas y tantos amores.
Un abrazo Á
Lo malo de querer saber es que "todo nunca se sabe".
Un beso
nela
¿Cuantas? ¿Incontables? Tantas como universos. Un fuerte abrazo extendido.
Lo he leìdo varias veces Amando, y cada vez he descubierto nuevas sensaciones recorriéndome desde la médula.
Poema íntimo y visceral que recorre emociones narra el tiempo vivido y el que debemos - debes?- vivir.
Como cada cosa que escribes lo encuentro perfectamente estructurado, estudiado en cada detalle para conducirnos por esas vueltas con la precisión estelar que pretendes.
La estrofa final, entre preguntas importantes para hoy y para mañana nos deja una pregunta que hace reflexionar: son esas vueltas olvidadas las que queman las miserias?
Gran final, amigo Amando, para un excelente Poema.
Enhorabuena. y gracias por las emociones que he sentido.
Un abrazo.
Leo
La primera edición del poema fue a destiempo. Culpa mía, que no cambié la fecha de publlicación. Pensaba dedicar el fin de semana -entre otras tareas- a pulirlo.
Bueno, el proceso ha tenido que ser más urgente y rápido.
Aquí os lo he dejado.
Gracias y bienvenida, Nela.
Gracias también por vuestras palabras Ángeles, emejota,Leonel.
Sólo un detalle,Ángeles, soy el primer hijo y el quinto nieto.
¡Vaya!, ¿de dónde de saqué yo lo de quinto hijo?, será por eso de "no hay quinto malo".
Pues más a mi favor la emoción de la madre, el primero es siempre especial, es en ese momento cuando ya se es madre para siempre.
Un abrazo Á.
O sea que el que te escribe ahora tiene unos cuantos de miles de giros más… ¡qué barbaridad!...Un par de preguntas retóricas, ¿Qué sería de nosotros si algunos de los giros los diéramos al contrario? ¿Llegaríamos a pasar otra vez el sarampión?
Buen fin de semana amigo.
Ese poema es muy intenso Amando. Intentas quitar importancia al hecho de tu nacimiento, qué no rompió el dicho, sino al contario; sin embargo estás dando una lección magistal de filosofía. ¿Qué significa un hombre nuevo en la tierra? Probablemente nada, si lo comparamos con lo desconocido, pero las preguntas que te haces importarán siempre, en el niño que fuiste y en los que tienen que venir, al menos en nuestro pequeño planeta. Digo también contigo, ¿cuántos giros se podrían haber evitado, cuántos se calmaron con lágrimas de árnica y cuántos deberían haber pasado por el crematorio de las miserias. Hoy lo que vale es que seguís girando, tu madre y tú y nosotros cerca.
Besos para un poeta.
Que bello escrito Amando, me ha encantado.
¿cuantos de aquellos giros suponían impulsos contra el odio y la mentira?
Eso me preocupa bastante, no me gusta ni el odio ni la mentira.
Feliz semana
Abrazos amigo
los niños que hacen preguntas a su mamá todos los conocemos. Unos siguen cuestionandose, tienen LA pregunta más importante y contestan con más preguntas. Aquí tenemos un poema filosófico: ¿Porqué el mal, porqué la indiferencia? Me gusta mucho esta idea de hacer el balance de cada giro, y como dice Flamenco quizá se mejoraría dando unos al revés.
Intenso y emotivo... Muchas gracias amigo por contarnos lo más hondo.
Besos...
Estupendo poema. Profundo y bello. Me han encantado las imágenes tan acertadas y hermosas que empleas. Enhorabuena.
Hola: Amando, excelente poema con profunda sensibilidad.
Me quedo con estas linias aunque tadas son importantes.
¿Serviría si en voz alta dijera,
como el graznido torpe de una urraca,
que han sido diecisiete mil seiscientos
setenta y nueve,aproximadamente?
¿Pero eso importa a alguien?
Importa y mucho, que siga girando el universo y tú que sigas contando cada giro.
Un abrazo y ser felices.
Publicar un comentario