sábado, 3 de septiembre de 2011

Necesito del barro



Cuando no tengo ideas, es absurdo escrutar cada palabra. Por más que lo intentara, nunca he sido prestidigitador de los vocablos, ni tengo la herramienta necesaria en algún almacén secreto y escondido para crear alquimias o espejismos.
Necesito del barro color lágrima esparcida en los sueños malheridos y empujados a abismos de fracaso. Necesito del barro color hielo de los cientos de túnicas mancilladas por manos criminales. Necesito del barro color niebla de las tiras de piel arrancadas del viento de la vida. Necesito del barro color miedo de cada pesadilla que asfixia la esperanza de los niños.
Necesito del barro color barro de las manos sangrantes después de acariciar tanta miseria.
Necesito del barro color musgo de los sueños cegados dentro de las pupilas apagadas. Necesito del barro color césped de los sueños danzando dentro de las pupilas encendidas. Necesito del barro color risa de todos los afanes que provocan la luz de las mañanas. Necesito del barro color beso de cada enamorado otorgando el sentido al perfume de las brisas.
Si no aparece el barro en mis palabras, ese barro de todos los colores que cruzan el pavor y la esperanza de esta especie, pregunta del planeta, sólo habré escrito humo y vendavales, o quizá la quimera de una sombra…
Necesito del barro, barro pintado en lágrima y en hielo, coloreado en niebla, miedo y sangre, barro con el color de todo el barro, barro teñido en musgo, pero también en césped, risa y besos.

18 comentarios:

Maria Sangüesa dijo...

Qué hermosura de texto, Amando. De barro somos y de aliento divino- o humano- que nos impulsa a ser, a estar, a actuar...
De dúctil barro los sueños que convertimos en materia, en hechos con voluntad de permanencia.
De barro, de arcilla de colores, es la vida que vamos caminando en pasos, en besos, en lágrimas, en risas, en amor que busca ser materia para ser menos sueño y más real...
Un abrazo muy fuerte.

Paloma Corrales dijo...

Me gusta ese grito controlado que habla de la necesidad, a veces devastadora, de escribir. Me gusta tu verdad de barro que arrincona lo superfluo. En definitiva, me gusta tu poema vital.

Un beso, Amando.

Unknown dijo...

Hermoso poema, Amando. Hermoso, lirico, necesario.
Ese final lo encuentro de una fuerza estupenda, como dice Paloma, grito controlado, esa es la definición correcta, pero que llega y se queda, a mí, me conmoviste.
Un abrazo fuerte.
Leo

Beatriz Ruiz dijo...

Para suerte nuestra no necesitas de alquimias... Y me parece maravilloso sacarle tanto al barro...

Eres increible!!!...

Besazo hoy...

Fernando dijo...

Querido Amando: realmente somos barro. Por ello me parece hermoso pensar en los demás desde la perspectiva de una posible cooperación al hermanamiento y a la solidaridad. Creo que tú lo haces con tus poemas y tus relatos, desde el sitio al que estás destinado, salvo que una riada impensable te arrastre. Un afectuoso saludo.

emejota dijo...

Pues me has dejado sin habla. Necesitas barro.... para confeccionar una vasija que contenga tantas emociones. Beso extendido.

Alena.Collar dijo...

Sí. Si no aparece el barro sólo escribimos humo.
Hay que mancharse las manos de barro para palpar la pureza.
Abrazo.

Isolda Wagner dijo...

Espléndidos versos moldeados con el barro del que hablas. Cuántas preguntas, cuántas certezas y cuántos deseos has dejado a nuestro alcance a modo de grito, como dicen todos.
Merece ser leído en alto y despacio, para escuchar el ritmo del planeta.
Besos, poeta.

Anónimo dijo...

Me has hecho pensar... Creo que a los creativos como tú nunca le faltan las ideas, estoy convencida de que no hay momento en el que camines indiferente: no es posible dejar de observar y sentir sin cerrar los ojos. El color del barro te asalta sí o sí, no hay más que leer este hermoso texto. Entonces, ¿no será que a veces nos preguntamos para qué, que el mismo cansancio nos bloquea? También hay un tiempo para descansar y poner en orden las ideas.
Siempre un lujo leerte, incluso tus humos y vendavales.
Un abrazo.

Flamenco Rojo dijo...

Alfarero de palabras que las moldeas para dar forma a este hermoso recipiente de sentimientos y sensaciones.

Un abrazo.

M A R T Í N P A R R A dijo...

barro... como dijo Fabrizio de André: del diamente no nace nada, de la mierda nacen las flores. En este caso, tu texto es una mierda...por tanto, en virtud de...

FranCCø dijo...

Querido Amando, cuando no tenemos barro escribimos sobre dicha necesidad, sobre como obtenerlo, sobre como robarlo o como podríamos fabricarlo... Humo, es cierto, pero humo bello, de color, de reflexión. Existen humos con aromas, si no que se lo pregunten a los fumadores de habanos.

Siempre tendremos barro, o nos manchamos las manos buscándolo.

Reflexivo poema.
Un abrazo FranCo, como mi acrónimo.

catherine dijo...

Amando, estaba leyendo otra vez Versos como carne , antes de empreder un nuevo viaje a España.
Me había perdido los poemas en versos libres a proposito de Gaza y otros hermosos sobre los niños infortunados. Y me encontré otra vez con el Vendaval de vida...
Así que puedes escribir sobre el humo o el vendaval, y sobre el barro también porque hay barro teñido en musgo y en césped, risa y besos como lo resume el maravilloso verso de tu hermoso poema.

Isabel Martínez Barquero dijo...

Me gusta mucho cómo escribes, Amando, sobre todo esa emoción palpitante que encuentro siempre en lo que te he leído, esa emoción que transmites y contagias, sello inequívoco de buen poeta.
Es un auténtico placer haberte descubierto.
Gracias por tanta belleza y un abrazo.

Lucrecia dijo...

Menos mal que llegué hasta el final del texto , porque ya empezaba a pensar que era Vd el poeta de las desdichas.
Sin duda que lo que escribe está surcado de detalles y que debajo de la confitería de un más que probado escultor de la palabra , se adivina el impulso humano y una creación espontánea .
Es lo que hacen todos los poetas.....¿no? perseguir el barro original para dejar en él tejido , temblor y cicatrices feroces . Pero también muchas pequeñas alegrías larvarias que subirán desde la palabra hasta la inteligencia del que sabe que escribir poesía significa estaciones de luz y otras de sombra negra . Y la lee y la llora o la disfruta .

Marina Filgueira dijo...

¡Hola Amando!!!
Aquí estoy de nuevo después de un alto en el camino los sueños. Si, vuelvo aquí atraída por la magia de tus letras compuestas con ese barro de todos lo colores que tú utilizas, ¡y por eso son tan hermosas y peculiares! ¡Y... dices cuando no tengo no ideas! Creo amigo mío, que eres un fenómeno de las ideas que cuando te salen, son el encanto de los que te leemos.

Perdona mi ausencia, ahora ya voy estando bien y comienzo a hacer mis pinitos.

Te dejo un abrazo bien fuerte de gratitud y admiración. MARINA.

neko dijo...

Necesitas barro, pero... lo encuentras, verdad? que no te falte el barro Amando, o que no te falte demasiado tiempo al menos

carlota dijo...

Cúando escribir, y cómo, y por qué. Estoy de acuerdo con tu teoría del barro, ha de haber algo que nos empuje desde nuestros adentros más profundos.

Besos