Quiero tener el eco de tu mirada, de tu voz, quiero el eco de tu presencia en mi mirada, en mi latido. En cada paso que dé sobre la piel de este planeta, quiero embrazar el eco de tu presencia. La dicha de tus ojos que iluminan el discurrir de la mañana.
Nunca te olvides: hoy somos felices.
Aunque la vida dañe con sus uñas de felino, aunque se tambalee la piedra clave del edificio alzado con prudencia, aunque un túnel oscuro nos envuelva, nuestros latidos marchan al compás, y el cimiento será inmóvil. Que el mundo entero sepa nuestra dicha, y el universo aplauda, grite, vitoree, que un sideral escalofrío cruce por sus vértebras, que las estrellas ovacionen nuestros besos.
Nunca te olvides: hoy somos felices.
Aunque la vida dañe con sus uñas de felino, aunque se tambalee la piedra clave del edificio alzado con prudencia, aunque un túnel oscuro nos envuelva, nuestros latidos marchan al compás, y el cimiento será inmóvil. Que el mundo entero sepa nuestra dicha, y el universo aplauda, grite, vitoree, que un sideral escalofrío cruce por sus vértebras, que las estrellas ovacionen nuestros besos.
Mírame, estoy dispuesto a ser molécula, ínfima parte de hálito que vuela desde tu boca al cosmos. Lo que soy entero es todo tuyo siempre. La calma de la noche, este silencio..., esta quietud me inunda con tus ecos y me devuelve tu figura. Que tu risa no me abandone nunca, que los sonidos que flotan y me rodean, me alcen a tu altura. Quiero que continúe mucho tiempo (la eternidad entera si es posible), este sonido que me inunda de paz.
Sueño que acaricio tus párpados, liquen cálido que reposa entre mis dedos. Sueño que tus hebras, pedazo de sol que alumbra mis dedos, enarbolan deseos de justicia. Sueño con el perfil de tu fragancia. Sueño que estás aquí, junto a mis dedos hambrientos, ávidos, de ti sedientos. Fuego podría ser. Podría ser huracán, o podría ser tormenta. Lo más probable es que la onda expansiva de esta pasión indómita erosione mi corazón, o en dos trozos lo parta, que acabarán cayendo a tus pies.
Tu sonrisa ha durado, sólo, décima de segundo, mas vale el mundo entero, el cosmos detenido entre tus labios. El horizonte púrpura danza el baile de la felicidad. En la cima de la montaña, el aire sueña que peina cumbres, que fabrica bucles de organdí para que adornen de hilos de plata el sueño: luz precisa.
31 comentarios:
Ese estado de ánimo en el que añorar no duele sino que alimenta el alma, soñar despierto y sonreír... Yo, personalmente pienso que para escribir esto hay que estar enamorado, no se puede sino describir de tal forma.
Lo que da de si una décima de segundo, una sonrisa.
Precioso, Amando, menuda estampa para empezar la semana.
¡Que bonito escrito! con tantísimo sentimiento.
Un abrazooo
Cuando se ama tanto, a veces el corazón no puede con tanto amor y parece que se va a partir en dos, pero acabará cayendo a tus pies, no hay otro fin para el que quiere y desea a alguien con esa intensidad.
Con la profundidad del alma...
He disfrutado mucho leyendo este texto-poesía.
Un maravilloso escrito!abrazo amigo.
Una oda al amor, una plegaria. Eso siento que escribiste. Y mi frase elegida es "Mírame, estoy dispuesto a ser molécula, ínfima parte de hálito que vuela desde tu boca al cosmos. Lo que soy entero es todo tuyo siempre."
Qué despliegue, qué derroche, qué maravilla de poema Amando.
El abrazo además de cariño envuelto en admiración.
Evaasecas:
Muchas gracias por tus palabras.
Es verdad lo que dices, y me alegra que estas palabras sean buen motor para el comienzo de la semana.
Verónica:
Gracias por tus palabras, creo que de vez en cuando está bien dar paso a los sentimientos y dejar que llenen las palabras.
Inma:
Es verdad lo que dices... casi siempre. En esto del amor siempre hay que contar con la otra persona, el destinatario de esa fuerza que es capaz de dinamitar hasta un corazón.
fiaris alfabeta:
Muchas gracias por tu constancia y por tus palabras.
Maia:
Aciertas más de lo que parece con tus palabras. Cualquier canto al amor en el fondo es una oración. En la mayoría de los casos el ser amado toma muchas connotaciones de la divinidad, y tampoco es novedoso en la poesía humana, engalanar la figura divina con los mismos atributos del ser amado.
Ese fragmento que destacas también me gusta particularmente.
Paloma Corrales:
La verdad es que es como una catarata desmesurada, lo tengo que admitir, pero ya sabes lo que se dice de que la boca habla de lo que en el corazón rebosa.
Es un hermoso texto, amigo: un poema, diría yo. Un abrazo.
Amor en estado puro. Enhorabuena al emisor y a la receptora. Es el mejor estado de ánimo al que se puede aspirar en la vida. Un abrazo.
Nada más ver la mano con la pluma, ya sabía que ese texto me iba a llegar al corazón. Bendita luz, que te acompaña.
Es una maravilla, casi místico.
Besos desde la bola de sílice.
Desnudaste el corazón, amigo... Gracias...
¡Ay! Amndo... con tantas frases tan hermosas, hijo de dios... no, no hay hirro que no se doble de inmediato... sin fuego ni tenazas. Que relato más precioso, abrazando de un sentimiento apasionado y poético. Un beso y se feliz.
Me dirás que exagero pero me hace pensar en el Cantar de los Cantares, mezcla de poesía pura y de oración, mezcla entre la figura divina y el ser amado.
Las frases de esta estampa se balancean con el viento acariciadas por el aliento…Es prosa poética, es poema en prosa, qué importa.
Un abrazo y un beso para la destinataria.
mateosantamarta:
Es un poema, sí. Agradezco tus palabras y tu seguimiento.
emejota:
Estamos de acuerdo. Yo diría que para eso ha nacido el ser humano.
Isolda:
Muchísimas gracias por tus palabras, que me llenan de emoción... Repito, porque lo creo, el amor dota a la persona del amado de cualidades habitualmente atribuidas a la divinidad, y también sucede a la inversa, muchos han dotado a la divinidad de cualidades que se atribuyen al ser amado.
Por ahí van o vienen los tiros de este texto, que a pesar de todo está escrito desde la misma bola de sílice. No me he despegado de ella.
Beatriz:
Pues sí, lo he hecho y no me arrepiento.
Marina:
También muchas gracias por tus palabras. Es una delicia esa espontaneidad tuya.
catherine:
Al arrobo que dicen que llegaban los místicos cuando escribían sus versos, te garantizo que no llegué... :)
Sí quizá exageres un poquito, pero no vas nada desencaminada en cierto sentido, como he apuntado ya un par de veces.
El Cantar de los cantares, en el que se inspiran, o del que beben tantos textos de los místicos y de los ascetas, es uno, sino el principal, ejemplo de lo que vengo diciendo sobre atribución de características de amor de pareja humana a la relación entre la divinidad y el ser humano. Por pura lógica, esta atribución de cualidades, dota a la relación de la pareja humana de unas gotas de divinidad.
Flamenco:
Muchas gracias por tus palabras.
Sí creo que se trata de un poema o de un intento de poema.
Pues si, como dices en uno de los anteriores comentarios, de la abundancia de tu corazón habla tu boca, no tengo más que darte la enhorabuena, porque has conseguido lo que tantos y tantos añoran toda una vida: conocer el amor. Deseo que te acompañe siempre este inmenso sentimiento, a ti y a los que te rodean.
Una declaración de amor sublime. Siempre un placer venir a leer, ya lo sabes.
Un abrazo.
Lo que escribes siempre me saca una sonrisa, me trasmite paz y alegría, no sé cómo lo haces, pero lo haces muy bien.
Alegras mi lunes.
Mercedes:
También aquí te doy la bienvenida después de tu periplo.
Así es lo confirmo.
Y no se trata de algo muy distinto a dar luz, brillo, calor y alegría a los días cotidianos, a la normalidad a la más pura de las sencilleces.
neko:
Pues es un placer saber que para esto también sirven mis letras, estas letras, al menos. No es que lo pretenda, pero es una satisfacción.
Ángeles:
Pues muchas gracias, es un placer y un honor. Que sea útil.
Publicar un comentario