Después de que la voz del cazador le obligara a salir corriendo, oyó el zumbido de la flecha que se clavó con precisión en el pecho del corzo que observaba el atardecer. El miedo empujó sus pasos a una carrera precipitada y quizá la larga falda se había rasgado en la zona del volante por culpa de una raíz que al anochecer se asomó sin previo aviso. Quizá sus manos de luna presentaban el leve rastro de un reguero de amapolas, porque después de tropezar su piel decidió adornar la espina de una rosa nocturna. Quizá en sus ojos todavía danzaba el primer vuelo de la lechuza. Quizá algún murciélago despeinó sus cabellos de joven rescatada.
Sin embargo nada era comparable con aquello. Una puerta por la que a penas pudo entrar. Tres o cuatro ventanas en las que sólo una de sus pupilas podía asomarse a través del cristal. Quince peldaños que subió en tres trancos no muy alargados. Cacerolas, sartenes, platos, vasos, cubiertos, del tamaño que siempre soñó para sus juegos y que nunca le permitió aquella mujer tan hermosa por fuera, como monstruosa por dentro…
Pero olió el intenso aroma del hogar, y supo, encorvada para no pegar contra el techo, que en adaptarse a aquella realidad residía su salvación.
Al menos la inmediata.
Sin embargo nada era comparable con aquello. Una puerta por la que a penas pudo entrar. Tres o cuatro ventanas en las que sólo una de sus pupilas podía asomarse a través del cristal. Quince peldaños que subió en tres trancos no muy alargados. Cacerolas, sartenes, platos, vasos, cubiertos, del tamaño que siempre soñó para sus juegos y que nunca le permitió aquella mujer tan hermosa por fuera, como monstruosa por dentro…
Pero olió el intenso aroma del hogar, y supo, encorvada para no pegar contra el techo, que en adaptarse a aquella realidad residía su salvación.
Al menos la inmediata.
30 comentarios:
Estimado Amando, qué bonita versión y reflexión sobre Blancanieves. Cómo nos cuentas el miedo que sintió, y el consuelo al verse rodeada de aquel mundo en miniatura... Y su resignación: ella no pertenecía a ese pequeño universo, pero era el mundo más seguro y tierno que había conocido. Ella no sabía aún que la esperaba la felicidad.
Un lujo, como siempre, venir a leer.
Hasta la próxima.
Un abrazo.
Estupendo relato. Blancanieves por dentro, genial, escribidor.
Un abrazo.
Amigo Amando: es bueno este relato de Blanca Nieves y mejor el que publicaste sobre Sevilla. También me he dado una vuekta por tus diseños y pinturas. ¡Eres un fenómeno! Un abrazo.
Hola Amando: Como siempre- rozando la poesía... este Hermoso escrito sobre Blanca Nieves, que tantas veces hemos contado a nuestros hijos. Pero no adornado con estas frases tan bonitas. Un gusto Leerlo. Un beso.
Mercedes:
De nuevo como siempre, gracias por tus palabras. Es el segundo micro que surge del cuento de Blancanieves, que como la mayoría de cuentos infantiles tiene más hondura de lo que parece. O a mí me lo parece.
Aquí lo podéis releer
AVATAR:
Pues muchas gracias. Blancanieves, como la mayoría de los personajes de los cuentos infantiles, sobre todo los protagonistas, suele representar muchas cosas. Es apasionante intentar zambullirse en su interior e intentar dotar de latidos a ese paradigma que nos han dejado los siglos.
Fernando:
Lo primero es lo primero. El genio en materia de pintura y diseño es mi hermano Mariano. Él es el verdadero fenómeno.
Gracias por tus palabras.
Tengo pendiente la lectura del artículo al que me remitías, y esta tarde, sin falta lo haré y allí dejaré mi opinión. Aunque desde aquí te agradezco que me cites en tema tan sesudo como la unión entre poesía y música.
Un abrazo.
Marina Fligueira:
Agradezco tus sentidas palabras.
Bravo Amando,
Los cuentos son lecciones de vida y de fantasía y siempre valen más que el dibujo animado (viendo el dibujo nadie podría imaginar como túlos adentros de Blancanieves) que se saca de ellos y sale en la tele.
Bruno Betheleim un gran psiquiatra de niños autistas,norteamericano, tiene un libro sobre ellos extraordinario.
Explica porque los padres no se tienen que conformar a la voluntad de sus hijos :
el niño piensa que si los padres le obedecen no serán capaces de defenderle del LOBO
La psicología detrás del cuento de Blancanieves…A la literatura infantil no se le da a veces el valor que se merece precisamente por ser infantil. Por este motivo no me extraña que algún amigo se ría de mí o piense que bromeo cuando les comento que de vez en cuando leo algún libro de este género. Y me ocurre que cuando leo alguna novela de mis hijos, mi pensamiento es que ojalá la hubiera leído en la infancia.
Hay psicólogos infantiles que estudian la influencia que pueden ejercer los cuentos tradicionales en los niños. Hay opiniones a favor y en contra, pero casi todo lo que he leído sobre este tema me lleva a la conclusión que tienen una importante influencia en la formación moral e intelectual de los chavales.
De Blancanieves se puede pensar que al pasar algunos días sin comer ni beber y acostarse en una cama que no es adecuada a su tamaño simboliza que se adapta a las dificultades de la vida. De los siete amiguitos la enseñanza sería, desde mi punto de vista, negativa…viven para trabajar, el trabajo es la esencia de sus vidas, donde no hay diversión, ni distracciones...¡Que barbaridad!
Un abrazo.
Pd.- Sigo con los g, dag, hg y kg…Sé más que un niño de primaria, jejeje.
Bueno... es que al igual que Blancanieves todos buscamos algo de calor humano, o no???...
Maririu... y es cierto... Cómo podrían defenderte unos padres que tan sólo pliegan a tu santa voluntad???... Y es así... Los niños necesitan referentes y sus padres deben serlo... amigos ya encontrarán en sus vidas...
Besitos...
maririu:
Es fascinante lo que cuentas. Algunas veces uno está delante de las cosas, pero no sabe explicarlas, y se trata de eso: derrortar al miedo, ser los escudos que protegen de la alimaña que nos acecha.
Flamenco Rojo:
Es que esta literatura, más que infantil, yo diría que es tradicional o de transmisión oral. En apariencia, sólo en apariencia es infantil, por eso nos fascina aún de adultos. Ahora estamos con Blancanieves..., quizá haya incursiones en otros cuentos, o en otros relatos tradicionales de otro tipo.
Lo de los psicólogos es otra cuestión. Detrás de las tradiciones, y no lo podemos olvidar, también hay un modo de entender el mundo, y hay una carga determinada que explica de un modo concreto los roles en la familia o grupo familiar, lo que es moralmente bueno o malo, etcétera. Y claro los peligros sobre ciertas cuestiones son evidentes...
Y en algunos casos, cuando la versión más conocida ha pasado por ciertos tamices y matices especiales...
Las equivalencias y las transformaciones... Yo llegué a poco más... En cuanto empezamos con las ecuaciones empecé a sentir una sensación de vértigo, un no sé qué en el estómago...
Beatriz:
Así es, me parece. Blancanieves hubo de adaptarse, y en eso estuvo su salvación, o la primera parte de ella, pero si decidió quedarse allí, es que a pesar de los pesares descubrió algo más que un mero refugio. En el fondo así somos todos los humanos.
¿Por qué no me contaron así el cuento? Claro que nadie hubiera sabido emplear las metáforas como tú, magistralmente.
Tampoco hubiera descubierto la moraleja que propones. Y eso que es la esencia de la vida!
Gracias por tu particular Blancanieves.
Un beso.
Isolda:
Es que me miras con muy buenos ojos.
Después de los celos de la reina y del miedo por los bichos a través de las trampas del bosque¡por fin! Blancanieves puede jugar a preparar la comidita, a empezar una vida nueve, una vida de verdad. Maririu, Beatriz y Bettelheim tienen toda la razón y Amando nos enseña esta transformación en algunos renglones preciosos.
Como a Pepe me gusta la (buena) literatura infantil, no sólo los cuentos tradicionales.
La litaratura infantil, después de las adaptaciones porno, necesita unas sacudidas de psiquiatría de ficcón..
Catherine:
Iremos viendo la transformación, si es que la inspiración me lo permite.
jordim:
No lo sé, no lo tengo muy claro.
Lo que tengo claro es que los personajes de los cuentos infantiles son un buen territorio para crear espejos
Todos los cuentos llevan moraleja, adaptarse a la realidad que nos rodea ha sido precisamente la salvación de la especie humana.
Besototes
Marian
Me ha encantado, Amando, en la capacidad de adaptación radica nuestra supervivencia. Encontarse con un mundo más pequeñito, con un espacio físico más reducido, pero sentirse a salvo, es como encontrar un oasis en medio de la desolación... ¡qué visión tan grande de un cuento tan clásico! Abrazos.
Acaba de llamarme Amando para decirme que no tiene conexión a internet desde esta tarde y por consiguiente no podrá colgar esta noche la entrega doceava del relato “La carta”. Si todo va como él desea, mañana a primera hora lo hará.
Un abrazo a todos.
Ji, ji, ji: es que Amando no quiere decirnos lo que hay en la carta. Mañana veremos. Buenas noches.
Uno: Blancanieves me daba terror. Y los siete enanitosni os cuento.
Menos mal que Amando lo cuenta de otra manera...
Dos: Creo que eso de que no puede entrarrrr en Internetttt...es para dejarnos con el "ánimo en suspenso" que decían los antigüos...
Malo, requetemalo...
Eso digo. Grrrr...
Marian Ramentol:
Efectivamente cada cuento tiene su moraleja, o sus moralejas. No dejan de ser, entre otras cosas, un elemento para la educación de las nuevas generaciones.
María Sangüesa:
Así es, esta es una de las claves de este cuento, la capacidad de la protagonista de pasar a vivir de un palacio a una casita de enanitos en un bosque.
Flamenco Rojo:
Muchas gracias por tu colaboración, al menos he intentado evitar suspicacias... :).
Creo que no lo hemos conseguido... 0_0
Catherine
Gracias por tu visita, y por dejar rastro de ella.
La verdad es que el equipo de casa, por más que intenté convencerle con todos los argumentos posibles, decidió que no quería comunicarse con el mundo exterior. Y como dice un amigo de Sevilla, no se puede luchar contra los hados.
Alena Collar:
Lo que dices sobre Blancanieves es un modo de verlo, y muy interesante, porque no es el único cuento que produce esta reacción.
Cierto componente terrorífico existe en los cuentos infantiles.
El contenido de la carta, si es que no hay problemas se desvelará el próximo treinta de abril, como está indicado, será su capítulo décimo quinto y último...
Salvo que internet determine alguna otra cuestión, porque visto lo visto...
Simplemente espero que lo de ayer por la tarde-noche-madrugada (hasta la una y pico lo estuve intentando a pesar del aviso de nuestro corresponsal en Triana), sea algo temporal.
Obviamente, Blacanieves del comentario de arriba, se refiere a vos, doña Alena :), de ahí que le haya suprimido.
Las prisas son malas consejeras.
Y gracias a mi corresponsal que me advierte del lapsus, si no lo habría subsanado seguro..
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