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Le ocurría algo muy extraño. Desde niño. No lo podía evitar. Algunas veces era una bendición y otras una maldición. Con el tiempo se acostumbró. Se acostumbraron sus padres, sus hermanas, los compañeros del colegio. Cuando lo alegó como defecto para no acudir al servicio militar provocó un debate ante el tribunal médico que solventó no con cierto alboroto entre los médicos encargados de la evaluación. Los que le conocían bien procuraban actuar en consecuencia, pero, ay, quién no tenía el gusto (o el disgusto) de conocerlo… Tuvo varias novias. Sólo una soportó más de un año, pero siempre supo que no se casaría… Y esto sucedía aunque no conociera de nada a la persona, ni sus circunstancias. Ni siquiera era necesario que atendiera a la conversación...Cada vez que alguien mentía en su presencia, provocaba que el color de su piel se tornara azul. Infalible. Siempre.
27 comentarios:
menos mal que no me conoce
pasaria azuloscuro?
se quedaria blanco como el papel?
maririu:
Pues, por si acaso, yo no me acerco mucho que a uno le acaban descubriendo.
Una historia genial. Hay enfermedades que marginan a quienes la padecen. Es una de las cosas terribles de la sociedad
Con qué aparente sencillez has escrito algo tan complejo.
Aprovecho, aunque ya lo hice en mi blog, para decirle a Isolda que sí, efectivamente es el pincho moruno en la plaza de la Biblioteca de Lovaina. De momento paso las vacaciones en Bruselas. Se me despistaron a mí las neuronas, jaja.
Saludos.
Neuroscopetrix:
Feliz estancia en Bruselas.
Muchas gracias por tus palabras. Y no sólo enfermedades físicas... En cuanto nos salimos de los esquemas establecidos, la marginación llega con mucha facilidad.
Se llaman los pitufos los hombrecitos azules del comic belga? Mi profesora particular se fue a comer con su sobrino.
Lo que quiero decir es que este hombre que se vuelve azul es como un suero de la verdad externo que desvela la mentira, es lo que los demàs no soportan. Esto lo margina aun màs que calquier otra diferencia u enfermedad.
Cattherine
Efectivamente, pitufos se llaman esos gnomos del bosque que tanto deleitaron tantas infancias.
Pues tienes razón, algunas veces este tema de desvelar la mentira puede ser un motivo de terribles marginaciones.
La canción de los pitufos
A eso me refería precisamente, a todo tipo de enfermedad que provoca rechazo ¿Y sabemos si nosotros estamos acaso sanos?
Ya quisiera estar de vacaciones. Pasaré allí las fiestas de invierno. No queda tanto.
Un abrazo
Quién no tiene un defectillo u otro? jejeje.
Besos
Marian
El pitufo del micro puede ser un retrato improbable ¿Quién sabe? Yo no lo consideraría un defecto, todo lo contrario, un virtuoso, para fines benéficos claro ¿Cuánto daría la Policía por tener a este pitufo, eh?
Sin embargo, un personaje que se da con mucha frecuencia, y este si es real, es el que yo llamo “Chapulín Colorao”. Son aquellas personas que por una razón u otra, positiva o negativa se pone colorada. Siente ese calor en la cara que no puede controlar. Socialmente es un problema, laboralmente para alguna gente es una debilidad.
Un abrazo rojo y blanco.
Ese por qué inicial, de antes de niño es el que me queda en el tintero. Así como así, desde niño y azul.
Picasso tuvo una época azul, ¿no?
Lo que no sé es porqué se tuvo que librar de la mili., que mentira le tuvieron que provocar para encenderse de tal guisa.
Abrazos.
Causa cierto desasosiego el relato. Sensación de agobio, muy bien conseguida, una sensación opresiva, de "turbiedad", no sé definirlo mejor.
Me ha encantado, pero eso era lógico porque es muy bueno.
escuchad este enlace
Se puede cantar más alto pero no mejó. Morente grande...me ha parecido escuchar al final a su hija Estrella, ¿no Tempero?
Según entiendo la conciencia es azul, pero si somos de a pie!
¿La sangre azul no era propia de la nobleza? Ayyy, que los dedos se me están azulando... Pues no será, que por mí no quede.
A lo que vamos, el micro inquietante y un tanto surrealista, Amando.
Pero es que los verdiales de Morente, me han dejado sin sangre y no me he vuelto azul. ¡qué prodigio de voces!. Gracias Tempero
Neuroscopetrix:
Supongo que vivir rechazado por los demás, como si uno fuera un bicho raro, tiene que ser durísimo.
Pero si uno se dedica a 'contemplar' el rechazo, en vez de seguir su camino probablemente sea peor.
Bueno, pues cuando estés allá nos cuentas. Ya falta menos.
Marian Ramentol:
Efectivamente es lo mismo que sugería Neuroscopetrix.
Los 'defectillos' quizá sea mejor llamarlos particularidades, ¿no?
Flamenco Rojo/ Pepe Gonce:
Creo que nadie habló de defectos. Yo diría que para él es una carga dura que, debido al mundo en que vivimos, se hace más pesada cada día, porque cada día se aplaude más la mentira, la apariencia, la hipocresía, el engaño, la apariencia.
Desde luego si Gayano (o cualquier poli) descubre a un personaje como éste, le entregan un sueldo vitalicio.
Ahora, qué cansancio. Todo el día cambiando de color.
Lo del Chapulín Colorao es verdad. La mayoría conocemos a alguno.
Tempero
¿Por qué...? Algunas veces la solución es encontrar el porqué, de acuerdo. Pero en otras es inútil. ¿Podría algún especialista haber mitigado esa 'caracterísitica' en caso de haber averiguado, por qué la tiene?
La escena es sencilla.
-¿Tiene algo que alegar?
-Verá, cuando alguien miente en mi presencia me pongo de color azul.
El capitán médico se empieza a reír y mira de reojo a los otros miembros del tribunal médico.
-No fastidie, recluta, ¿sabe que le podemos acusar de algo muy gordo?
-Le recuerdo que no sé mentir, no puedo, me pondría de color azul.
El capitán médico se empieza a poner un poco nervioso. Cuando el capitán se pone nervioso, se le tiñen las mejillas de color carmesí...- Está usted ante un tribunal médico, no ante un circo, nuestro trabajo es muy serio y aquí no se otorga ningún tipo de prebendas a nadie...
Pero el discurso se queda colgado sobre el precipicio de su garganta, pues a nuestro recluta, sin poderlo evitarlo, como siempre, se le ha empezado a tintar el rostro de un tono azulenco...
Veo que no me equivoqué al comentarte el modo de dejar los enlaces.
Me alegro.
Tempero, Flamenco Rojo:
¿Si a uno le recorre un escalofrío cuando escucha este tema, quiere decir que la cosa funciona?
Alena
Cuando empecé a escribirlo pensé en un tono irónico, pero en cuanto llegué a la segunda frase, ya sabía que no podría ser. Y cuando acabé la tercera, yo mismo me sentí desasosegado. Menos mal que es un micro, si hubiera sido un relato corto, no sé qué habría sido de mí.
Gracias por tu valoración.
Isolda
Nadie hay más noble que la gente sencilla, como ése que puede decir:
Nacieron para volar
los pajarillos del cielo,
nacieron para volar,
y las manos de Picasso
pa pintar y dibujar
la paloma de la paz.
Es surrealista e inquietante, sí; pero no más que tantos cuentos, incluso infantiles, que forman parte hasta de nuestros dichos populares: "Te va a crecer la nariz, como a Pinocho", decimos a los niños.
Amando, el flamenco es igual que el futbol, los toros, un buen vino…cuando escuchas un palo, ves una jugada de Xavi e Iniesta, una faena de Curro Romero o Morante de la Puebla, una copa de Ribera del Duero o de Rioja y te recorre un escalofrío por el cuerpo y se te ponen los vellos de punta, ahí lo que hay es arte puro y duro…Y Enrique Morente es un granaino con mucho arte. Y si, la cosa funciona.
Claroooo el flamenco se lleva en la sangre Pepe, y... que hermoso Arte el de Morente. Bueno pues yo quiero una copa de esas de Ribera del Duero, aunque se me ponga la boca azul haber si se me pone el alma alegre. Amando, no soporto las personas que marginan- que pretenden apartar de la sociedad a cualquier ser humano por ser simplemente diferente. Un saludo muy cordial. Ser felices todos vosotros/as. Buenas noches.
Flamenco Rojo:
Al final lo conseguiréis entre tú y Tempero, ya lo veo venir...
Marian Fligueira:
El Ribera de Duero alegra el corazón, pero creo que un buen Riveiro también ayudará.
En teoría es verdad lo que dices, y pienso lo mismo que tú...
Pero algunas veces uno se da cuenta que tiene gestos que marginan, palabras, comentarios...
Quizá sea inconscientemnte, pero salen. No sé qué pasa que salen.
Por supuesto que no lo digo por ti, hablo de mí, que es del único que sé algo.
Un beso, e intentaremos cumplir con tus deseos.
Jo, el subconsciente. Quise escribir Marina Fligueira
¿Por qué habrá salido Marian...?
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