lunes, 8 de marzo de 2010

EL VIAJE


Al alejarme de la carretera, no pensé que aquello me fuera a suceder a mí.

La noche era helada, a pesar de que el invierno, supuestamente, estaba a punto de pegar el portazo de despedida. De hecho, todos los medios de comunicación, a instancias de la Dirección General de Tráfico, aconsejaban que no se viajara sin las cadenas a mano, sin mantas, con el móvil cargado, con el depósito lleno. En realidad aconsejaban que no se viajara. Todos quietecitos en casa. Pero yo tenía que viajar. No había ninguna posibilidad de evitar el viaje. Ni tampoco podía llegar a mi destino de modo distinto al de montarme en un vehículo particular y adentrarme por esas carreteras tortuosas y estrechas, tan poco transitadas como los versos de los poetas.
Lo que olvidaron los de la Dirección General de Tráfico, los medios de comunicación y mi mala cabeza fue recomendar que se viajara con la vejiga convenientemente vaciada.
Así que en ese punto concreto de la carretera tuve que parar.
No tenía más remedio.
Era innegociable.
Llevaba veinte kilómetros buscando una gasolinera, una estación de servicio, un bar abierto en un pueblo… Parecía que estaba en el fin del mundo… Mejor dicho entre la nada y el fin del mundo.
Señalicé la maniobra. Dejé encendidas las luces de posición y los cuatro intermitentes funcionando y me alejé unos metros.
No escuché ningún ruido. Ningún coche. Ningún motor. Ninguna puerta. Ningún paso. Ni las estrellas dijeron nada.
Una vez aliviado retorné al lugar.
Al abrir la portezuela es cuando lo vi. Se iluminó el habitáculo y allí estaba.
Aquel cadáver no había viajado conmigo.
¿Qué juez creería esta historia?

50 comentarios:

catherine dijo...

no hay pisadas en la nieve? Serìa un mediocongelado que habrìa entrado en tu coche para acabar de morirse màs còmodamente. Y como ya no tenìa muchas fuerzas no dio un portazo muy violente.
Aquì, nevadas todo el dìa, como polvo pués copos màs grandes al anochecer;qué serà de mì? Se sabe bien que en el desierto no se ve a nadie y cuando pares tu coche llega mucha gente. Y yo en esta inmensa capa de nieve...

Unknown dijo...

Excelente texto, final sorpresivo. trama simple y compleja a la vez.
Saludos

Mercedes Pinto dijo...

Muy bueno, Amando. Por unos minutos me has tenido en un ay, y así me has dejado. Como todos tus relatos, bien redactado y ameno. Me quedo con la incógnita. ¿Continuará?
Un abrazo.

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Pues eso, que el conductor no entendía nada.
Ayer también nevó aquí.
No es imposible que en Segovia nieve en marzo, pero tampoco es tan habitual...
Y esta mañana cinco bajo cero...
Eso sí con el cielo como de seda azul, como de cristal recién sacado del congelador.

Amando Carabias dijo...

rober
Gracias por tu visita y por tu acogida. Te esperamos más veces entre nosotros.
Abrazos.

Amando Carabias dijo...

Mercedes:
Pues no pensaba continuar con ello, lo quería dejar ahí, porque luego me enredo y en fin.
De todas maneras, cuando me acostaba pensé que quizá, lo mismo.
Pero en principio, no

Flamenco Rojo dijo...

El fiambre ya iba en el coche antes de salir de casa…me suena de haberlo visto en alguna serie policiaca. Si yo fuera el conductor (maldita próstata) no me preocuparía por lo del juez…Entre los del “C.S.I.”, la gente de “El Mentalista”, los de “Bones”, “los hombres de Paco” descubren el misterio en menos de una hora que es lo que suele durar un capítulo de estas series televisivas.

Un abrazo y la próxima vez haz pipí antes de salir de casa.

Amando Carabias dijo...

Flamenco Rojo:
En este caso, habrá que hablar con el tal Paco y sus hombres. Los otros pillan a trasmano, aunque quizá sea un caso para el inefable Gayano.

maririu dijo...

eso es un microrelato todo dicho y todo para imagimar. a mi me gustaría que fuera Bones porque me río mucho con ellos.
Se ve que eres el autor porque a quien se le puede ocurrir: "tan poco transitadas como los versos de los poetas"
Aparte Catherine tiene razón alguien que sentía más frío que el conductor porque se había apeado para lo mismo y le habían abandonado.

Amando Carabias dijo...

maririu:
Pues ya tenemos otro candidato a investigar el caso. A Bones no le conozco tanto, y creo que será una lástima.

De todos modos, aunque es verdad que sea el autor, reconoce que los versos de los poetas son muy poco transitados.
Un beso.

catherine dijo...

O serà que el conductor es sordo?
Hoy, aquì sol y frìo, un tal frìo que las friambres se conservan en un estado perfecto para los investigadores. Un frìo seco que cura la tos, qué tal la tuya?

maririu dijo...

en París un sol que encanta pero cuando sales... el aire parece que viene directo del polo Norte.
Bones es muy divertida porque se burlan delos CSI a fondo pero disimuladito, da gusto el ciéntifico de los gusanitos y mariposas, la qe todo lo puede en virtual y te saca un retrato exacto de una clavea.. etc etc...
Gaspard digamos ¿qué día vuelves al Branly? tendrás dos corresponsales internautas que acudirán a tu cita de miércoles a lunes salvo jueves por la mañana que tengo médico y lunes que está cerrado

Isolda Wagner dijo...

Me ha gustado y sorprendido mucho. ¿El coche estaba guardado en el garage? No especificas si el cadáver estaba en el asiento del copiloto o detrás.
Yo lo dejaría ahí (micro y fiambre), pero si tuvieras que investigar, apuesto sin duda por Gayano.
Continúan los besos lluviosos.

Evaasecas dijo...

Estupendo como siempre, Amando, pero de verdad, apetece un poquito mas...
Ya se que no tienes pensada una segunda parte y yo, sinceramente, no se qué pensar sobre el cadáver... hasta podría ser todo un sueño.

Un abrazo.

catherine dijo...

De acuerdo con Isolda, es un microrelato perfecto, lo dice también Maririu,pero si hay investigaciones el mejor es Gayano.

Amando Carabias dijo...

Caterine:
Pues a pesar de los cinco grados bajo cero de ayer (camino similar llevamos hoy), la tos parece que se ha asustado y va de retirada. En los últimos días, hasta anoche justamente, se había convertido en un andancio surrealista, pues sólo me atacaba por la noche cuando me acostaba, de tal manera que no podía pegar ojo... Pero quizá, después de leer lo que escribí, se ha dado por aludida y ha pensado que el próximo fiambre podría ser ella y se ha largado... Espero.
Pero quizá sea una retirada estratégica.
El médico, a quien he acudido esta mañana, opina que la cosa va bien. Pero no me ha especificado si para mí o para la tos :).

¿El conductor sordo? No consta. Simplemente no vio, no oyó...

Amando Carabias dijo...

maririu
Ah...! En cuanto que mi tos ha leído lo de las mariposas de Bones ha decidido salir volando. Ha pensado que si está ese investigador tan próximo a mí, quizá corran peligro.

Amando Carabias dijo...

Isolda
¿O sea que vamos a necesitar una precuela del micro o se lo dejamos a Gayano?
Pero aún así yo diría que hay otra pregunta previa: ¿A qué se debe la necesidad de este viaje?

"Pero yo tenía que viajar. No había ninguna posibilidad de evitar el viaje. Ni tampoco podía llegar a mi destino de modo distinto al de montarme en un vehículo particular y adentrarme por esas carreteras tortuosas y estrechas, tan poco transitadas como los versos de los poetas"

¿Hubo una trampa, un engaño, simple casualidad...?
Sí apuesto por micro con fiambre, pero la reaparición de Gayano es tentadora.

Amando Carabias dijo...

Evaasecas:
Un sueño... ¿de quién?
Del escribidor, del conductor... ¿del cadáver?
Esto sería estupendo...

Gracias por tus palabras.

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Antes se me olvidó la hache, perdón.
Me estáis poniendo los dientes largos.

Isolda Wagner dijo...

Perdón, ¿quién pone los dientes largos a quién?
Me conformaba con el micro tal como está, pero si tu mismo nos propones las preguntas, es que no queda otra! Necesitamos respuestas, efectivamente ¿por qué esa necesidad perentoria de viajar?
Me temo que tendrás que contratar a Gayano.
Besos

catherine dijo...

Amando, ¿cómo quieres que no me vengan sonrisas y hasta risas cuando hablas así de tu andancio?
Mañana me voy a probar el clima de Paris, con Internet en una casa amiga. ¿Qué o quien habra en el Museo du Quai Branly y en muchos otros lugares? Lo contaremos. Hasta luego.
P.D: no importa mucho la hache, en galés se escribe Catrin. ¡Qué suerte tiene mi resobrina!

Amando Carabias dijo...

Isolda:
¿Recuerdas que la serie de 45 microrrelatos, '¿Qué decisión tomar?', también empezó así?

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Ya nos contaréis.
Dale muchos besos de nuestra parte y que se cuide los ojos.

Maria Sangüesa dijo...

Pido perdón a los demás amigos por lo que te voy a decir,Amando, pero es un micro perfecto. Muy oportuno en estos gélidos días, buena ambientación para encuadrar lo esencial de la historia, final sorprendente y abierto. El efecto de querer saber más se debe a que está muy bien escrito, pero la magia de un buen microrrelato radica precisamente ahí, en el final que cierra la historia y abre la imaginación del lector. Un abrazo, escribidor, y mis disculpas a los demás.

Beatriz Ruiz dijo...

El final me ha dejado pasmada por inesperado... Y además no tengo una respuesta, de dónde carajo salió el cadaver...

A mi me pediría el cuerpo salir corriendo y abandonar coche y cadaver, pero claro, en medio de la nada??? casí optaría por compartir el resto de ese viaje que no debería haber hecho nunca... y desde luego lo que menos me preocuparía en tales circunstancias sería un juez...

Pero tengo otra solución... tirar el cadaver en la cuneta...

Amando Carabias dijo...

María Sangüesa:
Muchas gracias por tus palabras.
No sé si son tan merecidas, pero siempre son gratificantes.

Amando Carabias dijo...

Beatriz:
Si tuvieras una respuesta, tendrías que entrar a formar parte de la CIA o de la NASA.
La solución para el cadáver es simple y por tanto efectiva, sobre todo si las huellas que dejen los neumáticos en la nieve pueden confundirse con muchas otras huellas.

maririu dijo...

Amando quieres tanto a tus "hijos" que no nos dejas ni un resquicio para la imaginación la nuestra, hasta beatriz que dice no saber ha abierto las puertas a la fantasía así que haz otros micro relatos al repeto pero no nos digas que son la continuación.
Telo dice María Sanguesa, te lo dijimos con Isolda y Catherine, por favor no seas castrador. Dejanos con el cadáver en el asiento...

Amando Carabias dijo...

maririu:
Esto es como el resultado final de una faena, hay división de opiniones...
No es mi inteción que los lectores dejéis de usar vuestra imaginación, sino la contraria.
Y si te das cuenta, ahora mismo acabas de proponer una nueva variante.

Inés dijo...

Dios mío! qué final! me haces sonreir Amando, tu prosa nos pone en jaque a todos los lectores.
Es genial todo, como vas envolviendo la historia y de repente algo inimaginable, y ahora qué? continua por favor, si? no puede quedar así.

millones de besos y abrazos por las veces que me he perdido el placer de leerte,

Inés dijo...

Estoy de acuerdo con Maria Sanguesa es un microrelato perfecto (pero y si lo continuas... ;)

Besos

Flamenco Rojo dijo...

Ahora recuerdo haber leído no hace mucho otro micro que bien pudiera ser una segunda parte de este:

Estaba la noche de perros y sonó el teléfono en el cuartelillo…Alguien encontró un cadáver en la carretera y tuvo a bien informar a la guardia civil. La benemérita se personó a los diez minutos en la escena.
Después de revisar huellas, pisadas, restos, sin más dilación empezaron a levantar el atestado.
- A ver Canales escribe ahí: el muerto se encuentra en el arcén de la carretera…
- Mi sargento, una pregunta ¿arcén se escribe con “h” o sin “h”?
Se escucha un ruido raro…un golpe y algo así como un cadáver rodando…
- Canales escribe: el muerto se encuentra en la cuneta…

Amando Carabias dijo...

Inés:
Qué alegría volver a encontrarte por aquí. Te prodigas poco y se te extraña (ahora me refiero a tu blog).
Muchas gracias por tu palabras... Y sí tienes razón creo que lo dejaré así, aunque quizá lo continúe :))

Amando Carabias dijo...

Flamenco Rojo
Pues menos mal que la salida de la pareja de la benémerita fue un miércoles... Si llega a ser el jueves o el viernes no salen

Marian Raméntol dijo...

Imagino que no nos dejarás así ¿no? continuará... ¿verdad?, espero que sí, porque me ha dejado con sed de más.

Besísimos
Marian

Amando Carabias dijo...

Marian Ramentol:
A pesar de que las estrellas callaron aquella noche, lo consultaré con ellas.

Ventana indiscreta dijo...

A ver, Amando, ¡tanto escrúpulo en adelantarte a la justicia! Se coje al muerto y se lo despacha dejándolo cuidadosamente en el suelo, que fresquito aguantaría hasta que, de día, se resolviese por algún otro incauto que decidiese mear. yo, al menos, me hubiese desecho del marrón.

Besos.

Amando Carabias dijo...

Venta...
Eres la segunda o tercera persona que propone la misma solución a este problema.
¿Alguien se le ocurre por qué este conductor piensa en lo difícil y no en lo fácil?
Yo no lo sé con precisión, pero si se le ocurre es porque hay algo que le conduce a ese pensamiento.
¿Evidencias en su coche? ¿Miedo? ¿Un instante de ofuscación ante sorpresa de tal tamaño?

¿Dejariáis el fiambre en la cuneta sin más, y seguiriáis tan tranquilos?
Yo tengo un problema para contestar: no conduzco. Pero así, a bote pronto: si suelto el fiambre sin más, creo que no dormiría muy tranquilo...
En todo caso no dormiría.

Amando Carabias dijo...

Esta tarde nos vamos al cine. Se celebra en estos días el 7º ciclo de cine de la mujer creadora. Es una forma de celebrar el día de la mujer trabajadora que, con propiedad, fue ayer.
Este es el enlacedonde podréis encontrar la información.

maririu dijo...

El cadáver es una mujer trabajadora que de tantoa celebración por adelantado le cogió un soponcio celebran un día y el resto del año se celebra la fiesta del chivo, y como no le gustaba decidió trasladarse y castigar al primer meón que se le presentará.
A estas alturas de movilfonía todos sabemos que lo primero es llamar a la policía si no se quiere ser sospechoso, como lo hace el prota de Flamenco R.

Gaspard dijo...

No sé si es un caso para los CSI, pero sí para el inspector Flint, el que persigue al Wilt de Tom Sharpe. Tal vez el cadáver es una muñeca hinchable.

Bueno, habrá que esperar a que nos cuenten qué cadáveres descubren Maririu y Catherine en el museo. Yo descendí ayer hasta la costa vascofrancesa (estoy de obras), y he visto que en mi jardín las hortensias que podé ya empiezan a florecer, a pesar del maldito frío.

Si encuentro un cadáver en el desván os lo contaré, o lo hará algún vecino desde la ventana indiscreta. Un abrazo.

Amando Carabias dijo...

maririu:
Es una posibilidad.
Tienes razón en ese comentario de media frase tan cargado de tu ironía sarcástica: un día de celebración, resto del año de chivo expiatorio. Lo que ocurre es que es una forma para ir cambiando las cosas. Tampoco soy mucho de celebraciones, creo más en la justicia, también se ha dicho aquí en alguna otra ocasión.

Aprovecho esta intervención para hacerte una pregunta relacionada con la película que vengo de ver cuyo título es "Tres dias con la familia". Está rodada por una directora catalana, Mar Coll (que obtuvo con esta cinta el Goya a la mejor dirección novel). En ella retrata una familia procedente de cierta alta burguesía catalana, gerundense por ser más precisos.
Y aquí llega la pregunta:
¿Es costumbre entre las familas catalanas (quizá las de alta burguesía) que no se reciban visitas de amistades durante el velatorio del deudo en el tanatario?
¿Es costumbre en Cataluña o enntre determinadas clases sociales catalanes después del funeral reunirse la familia a comer y a continuación celebrar en el entierro en el cementerio?
Es que estas dos situaciones se producen en la película y me han sorprendido.

Me dirijo a ti por utilizar este comentario, pero quizá también pueda cualquier otro como Isolda, Marian Ramentol, Paco Gómez...

Amando Carabias dijo...

Gaspard:
Lo mejor de todo lo que cuentas, a parte de tomar nota de otro posible detective para este caso y otra posible condición del cadáver, es el anuncio de la llegada de la primavera... Ese paso inexorable a pesar del frío, a pesar del hielo, a pesar de las temperaturas bajo cero.
Es para sonreír.

Marina Filgueira dijo...

¡Ay! ¡Que sustoooooo! Que Dios no aparte de vernos en una situación semejante. Ay que ver a donde llega la imaginación… a pesar del cadáver me gusta el relato. Un besito. Se feliz.

Amando Carabias dijo...

Marina Fligueira:
Muchas gracias por tus palabras.

maririu dijo...

que yo sepa no es costumbre ni lo uno ni lo otro y he estado en entierros de todas categorías aunque no gerundeses.
En Francia si que es costumbre comer el día del entierro , lo ves es cuentos de Maupassant etc. La primera vez que lo viví me gustó la costumbre porque todos los amigos y familia del muerto intercambian recuerdos del difunto y parece que esté ahí entre los comensales y como se come el ambiente es relajado y hasta te ríes con los recuerdos.
La cineasta puede también tener recuerdos cinematográficos como "el festin de Babette" por ejemplo o otros.
Hoy soleado con cierzo heladísimo hemos paseado por el Jardin des Plantes y a lo largo del Sena pero eso era en autobus porque estábamos heladas.
Gaspard te lo pierdes estamos aun muy fotogénicas (sobre todo Catherine) no tanto como en el mundo virtual pero...

Amando Carabias dijo...

maririu:
Doy fe de la fotogenia de Catherine. De la tuya, aunque no la dudo, no he tenido la oportunidad de comprobarla en persona, pero estoy seguro de que sucederá.
Parece que nos conformamos con el sol, aunque la temperatura más alta del día de hoy en Segovia no habrá superado los tres grados, que son seis o siete grados más que la mínima.
Gracias por la información que, además coincide, con otras que me han llegado via mail.
Uno concluye pues que todo han sido necesidades del guión buscando más efectos, quizá metáforas o explicaciones contextuales de la situación de esta familia.

Marina Filgueira dijo...

Ah pues si, era costumbre en Galicia- depues del en tierro, una cena para toda la familia, el menú era bacalao cocido con patas, con una buena ajada por encima... si el entierro era por la mañana, entonces se celebraba una comida al medio día. Esto, hesto lo recuerdo desde niña hasta que me casé. Luego se fue perdiendo esa tradición ancestral. Besos sin...

Amando Carabias dijo...

Marina Fligueira:
Pues no sé si es lógico o no que se pierdan estas tradiciones, quizá sea un peaje que estemos pagando por el cambio en el modelo de vida.
De todos modos la duda no era la celebración de la comida (o cena), sino que ésta se celebre entre el funeral y el entierro.