viernes, 15 de enero de 2010

TRIBULACIONES DE UN ESCRIBIDOR EN UNA CADENA DE MONTAJE


Verán ustedes, he descubierto en la prensa de hoy que hay personas que dicen ganarse la vida escribiendo en un blog. O sea blogueros profesionales que habrán firmado un contrato con alguien y a cambio de un salario se dedican a publicar post tras post.
(Los detalles en el enlace de más arriba).
Se trata de escribir y escribir y escribir y escribir… (pongan ustedes la cifra que quieran en el exponente de este infinitivo).
Mientras leía el artículo, me imaginaba la dura y rutinaria vida de un trabajador en mitad de una cadena de montaje. El bloguero escribe, pero no es suficiente un artículo al día, ni dos, ni tres, ni cuatro… Quizá tampoco sea suficiente ni un blog, ni dos, ni tres, ni cuatro...
Uno, que es proclive a la imaginación, como ya saben ustedes, le da por pensar que los lectores devoran letras, una tras otra, y a las pocas horas padecen nuevamente hambre, hambre de palabras virtuales que sacien esa necesidad. Y aunque las letras de hace cinco horas, pongamos por caso, continúen pareciendo apetecibles a la vista, ya no sirven, han debido de perder todos sus componentes nutricios. El voraz lector necesita nuevas palabras, nuevas ideas, nuevos comentarios.
El bloguero se convierte en una fábrica de producir palabras, de vincular artículos, de subir vídeos, de insertar imágenes, de enlazar melodías, de responder comentarios, de moderar discusiones...

En una vida anterior (la previa a mi entrada en Internet), este escribidor soñaba con la misma pretensión con la que sueñan nuestros intrépidos blogueros descritos en el mentado artículo. O sea, vivir de la escritura. Subrayo, vivir, no hacerse millonario. Precisamente después de arribar a la compleja retícula universal e inasible, me doy cuenta de que semejante anhelo sigue siendo un sueño, con visos de tornarse horrenda pesadilla. Un sueño al que se aferran cada vez más personas, escritores de calidad literaria perfectamente contrastable, tal y como se demuestra, por ejemplo, tras la lectura de los blogs de muchos amigos y amigas que lo tienen y además regalan algunas de sus reflexiones en el espacio de este escribidor.
Escribir como quien forma parte de una cadena de montaje no es mi aspiración. Más bien sería una pesadilla.
Hoy todo es cocina rápida, consumo rápido, viajes rápidos... escritura rápida. Más que mirar se echan vistazos, más que leer se sobrevuela sobre las palabras. Resumen, brevedad, velocidad... Casi estaba por escribir superficialidad. No en el sentido peyorativo, sino en el más objetivo posible, o sea quedarse en lo evidente en lo primero que se ve, en lo primero que llega a nuestros ojos.

Este escribidor tiene la sensación de que el ser humano ha puesto una velocidad en su propio funcionamiento vital que no se acompasa con el ritmo existencial para el que está diseñado. Mi padre a veces lo dice de un modo muy gráfico, recordando una vieja expresión de mi abuelo: "Tranquilo que los hombres no somos escopetas".
Nos hacen creer que somos una especie que necesita de la velocidad, y no es cierto. Es un engaño más de los poderes económicos que destruyen nuestra verdadera esencia, acaso porque el cimiento sobre el que se asienta nuestro modelo de sociedad no es otro que el consumo, pues éste es el que garantiza la producción de bienes.
Cuando este escribidor sólo era lector cibernético, descubrió algo que ya fue anuncio de lo que le esperaba: los eslabones de los periódicos digitales.
¿Qué?
Un periódico digital que se precie (no hablo de aquellos que son digitales en segundo lugar, es decir que, además y aún, mantienen la edición que se vende en los quioscos), cambia de titular cada muy poco tiempo. No importa, o importa poco, que la información sea realmente noticia de titular. Su única trascendencia estriba en su novedad. Es como si se hubiera establecido un nuevo axioma periodístico: Si es nuevo es noticia. En ese preciso instante forma parte de una cadena, es un eslabón más, que desbanca a la información precedente de la imagen de apertura y a su vez será descendido en la pantalla del lector pocas horas o minutos más tarde. Parece que uno entra en la vorágine del consumo de noticias. Uno no respira aire, respira noticias, y si la noticia no cambia el aire está viciado y puede morir por falta de oxígeno. El lector bien informado tiene que saber todo lo que pasa en el momento en el que pasa (y si es posible un poco antes de que ocurra, mejor aún).

Pues bien, semejante cosa es la que parece que ocurre con los blogs a los que me refiero.
Después de unas pocas horas, se supone que el valor de lo escrito ha caducado y es necesario renovar continuamente para mantener el nivel de tráfico de la página, o sea que el blog sea siempre como una autopista en hora punta.
Durante el primer año de vida de este blog, este escribidor mantuvo, como recordarán ustedes, un ritmo que llegó a ser infernal, de una entrada nueva al día. O sea, y a la vista de lo publicado en el artículo enlazado, y sin ser muy ambicioso, hubiera percibido unos treinta euros al mes.
Ni para amortizar un café diario.
Pero este problema no es sólo de los blogueros.
Los escritores, en el sentido más tradicional del término, en el fondo se pelean a brazo partido con los mismos fantasmas.
Un Escritor Importantísimo (vamos de los que se sientan en las mejores poltronas de las salas más exclusivas del famoso CAS -Club de las Almendritas Saladas-) le contó a un amigo mío que el escritor de hoy en día para sacar un mínimo de soldada con sus libros tiene que escribir muchos más que antaño.
El escritor tiene un número más o menos limitado de lectores y, salvo milagros puntuales, las ventas de sus libros oscila poco de unos a otros. De ahí que los escritores que se dedican a escribir para vivir, en muchos casos, parezcan jornaleros de la palabra, pues necesitan de un libro de creación al año, un artículo semanal en un suplemento de un periódico de tirada nacional -que se convertirá en libro recopilatorio, casi seguro-, formar parte de alguna conocida tertulia radiofónica o televisiva, unas cuantas conferencias, diversos concursos, varios pregones y un blog o página web que le permita también cazcalear (hacía tiempo que no salía, no me riñan ustedes) por esta retícula universal e inasible.
Imposible.
Me niego.
Al final va a resultar que la mejor situación es la que tengo.
Porque, entre artículos, post, concursos, pregones, conferencias, entrevistas, promociones, viajes... ¿cuándo, dónde, cómo escribe...? ¿O habrá que sustituir esos pronombres por el personal y suponer, además, que el color de la piel del escritor se oscurece?
A mí me parece, no sé a ustedes, que el escritor tiene que escribir, no juntar palabras. Y alguien tendrá que recordar que escribir está emparentado con el arte, es una actividad creativa, y esa capacidad no es inagotable, antes bien suele ser un embalse más bien pequeño, al que hay que cuidar al máximo, porque siempre llegan los años de sequía.

71 comentarios:

Alena.Collar dijo...

Amén.

Yo también leí el articulito de marras. Me dio pena. Pena no del que lo hizo, el articulo, digo, sino de esos blogueros.
Me dio pena porque han perdido algo para mí importantísimo: pasárselo pipa escribiendo.
Me dio pena porque además pasan por ser "alguien"...¿cómo decirte?...tener no se cuantos post sobre la insustancialidad, pero eso sí, "que provoque", "que haga que vengan a leerme", o sea, a clikear...qué lástima. Y además, qué quieres que te diga, qué traición al oficio de escribir. Para mí no son escritores, son asalariados del post de moda.
No me interesan; igual que no me interesa nada todo ese mundo "bloguero" que sale en los medios pretendiendo representar a los blog.
Miren ustedes, a mí no me representa nadie; yo me represento sola. Y escribo porque no sé hacer otra cosa y porque me divierto.
Pero ellos son -no te olvides- "MuyImportantes"...marcan "Estilo"...¡ oh!...
Si se me permite: Que les den.

Besotes...

Amando Carabias dijo...

Alena Collar:
Y sin embargo se sostienen (en el artículo, digo) afirmaciones del tipo: Y sin embargo no protestan porque les encanta lo que hacen...
Si me permites un leve matiz, mejor dicho una precisión sobre el enfoque de algo que dices.
Mi entrada no va tanto como diatriba contra los Muy Importantísimos que marcan estilo y que llegan a cobrar hasta 2.000 euros al mes.
Mi post, más bien, es una queja por el abuso en que se ven metidos algunos -supongo que con poco más que llevarse a la boca y todo el tiempo del mundo disponible-, la mayoría, los que vienen a cobrar unos cincuenta euros al mes, por decir algo.
Escribir así tiene que ser un infierno en manos de un demonio además de malísimo enloquecido.

Mercedes Pinto dijo...

No podría estar más de acuerdo contigo, de hecho he hablado varias veces en mi blog de la diferencia entre juntar palabras y enlazarlas poniendo en ellas toda la dedicación que requieran hasta conseguir un primoroso bordado irrepetible. Lo primero es un trabajo, que con un poco de esfuerzo puede realizar cualquiera; lo segundo es un oficio de artesanos para el que hay que tener un don que te domina, hasta tal punto que pretender vivir de él es negar la propia esencia del arte, porque es el arte quien vive del artista hasta acabar con su último aliento. Vivir de tus obras es un hecho secundario, para nada la meta del artista. Todos estos textos en cadena se parecen entre sí como cualquier producto de fábrica, no salen del taller de un artesano.
Hace algunos años la literatura comenzó un periplo peligroso, como la mayoría de las disciplinas artísticas, en el que valor y precio se ha confundido. Mero mercadeo.
Disfruté tu entrada, muy amena e interesante.
Un abrazo.

Amando Carabias dijo...

Mercedes:
Qué hermosas palabras cuando escribes, es el arte quien vive del artista hasta acabar con su último aliento.
Quizá por esta especie de posesión es por lo que se desee vivir también de él.
Sobre esto quería matizar algo, al hilo de lo que escribes.
No es que uno pretenda vivir de las letras por un afán utilitarista, sino que es tal la pasión que por ellas sentimos, que a uno le da la impresión que arar en campo diferente a este es traicionar a quien vive en nosotros y nos regala estos momentos tan maravillosos e incluso divertidos de la escritura.
Poder vivir de la escritura en el sentido de que la existencia, entonces, se podría dedicar con más plenitud a ella.

Marian Raméntol dijo...

Razón llevas Amando, y estoy de acuerdo en casi todo lo expuesto, excepto en que los lectores tienen sed de palabras y leen compulsivamente. Noooo, no, eso no es así. En la mayoría de ocasiones, los blogs tienen un comportamiento forero, es decir, los blogeros se sienten en la obligación de comentar a aquellos que les comentan, son las normas de cortesía de la casa, por lo tanto ni siquiera leen, entran, lanzan una mirada general, y te dicen algo así como "qué bello" o "muy interesante", te saludan y Ciao. Eso no es leer, al menos bajo mi punto de vista, más vale visitar menos pero hacerlo bien. Se puede aprender mucho de ese "juntar palabras" siempre y cuando el lector esté dispuesto a ceder su atención de verdad, no te parece?

Un fuerte abrazo
Marian

Amando Carabias dijo...

Marian Ramentol
A veces, sí, a veces sucede lo que comentas. Esa visita fugaz y rápida que es mero formulismo, mera rutina, mera devolución de visita, por así decir. Pero no en todos los blogs sucede lo mismo. O no en todos los casos de quienes comentan... Quizá así sea más exacto.
Al menos servidor en "Pavesas y cenizas" y en "Euritmia en la red" (pobrecito mi otro blog)no tiene esa sensación, sino más bien la contraria, lo cual además de ser gratificante, dice mucho de quienes me leéis.
En general todos los contertulios de este espacio demuestras que han leído la entrada.
A mí también me gusta hacerlo, y por eso si no se me ocurre nada que decir prefiero el silencio, antes que esa especie de toque de campana para dejar constancia de la presencia de uno.
Un beso

Mercedes Pinto dijo...

Te he entendido, sé que no criticabas la posibilidad de que la literatura te de lo suficiente para entregarte a ella por completo, sino el hecho de "prostituirla" para enriquecerte.
Un abrazo.

Evaasecas dijo...

Si queremos leer, claro que lo hacemos, lo que pasa es que hay blogs lamentablemente que te hacen sentir muy inculta, o, para ser más exactos, me doy cuenta de que me vienen grandes, me acomplejan. No me gusta leer con el diccionario en la mano. Puede que alguna palabra se me escape, claro, eso es evidente, pero el contexto suele darme pistas. En estos blogs de los que hablo, se ve claramente que se hacen visitas de cortesía. Es normal, nadie los entiende, o nadie se atreve a admitirlo. Una vez leí, y se me quedó grabado, que la forma de suicidarse de un bloguero era tirándose desde lo alto de su ego. Por supuesto, es un chiste fácil, pero me gustan los blogs en los que se habla de las penurias o alegrías de la gente, en los que se demuestra una humanidad que me es muy cercana y en los que me hacen sentir como una igual, que, al fin y al cabo, con nuestras desgracias incluidas, es lo que somos, iguales.
A pesar de todo, una vez superado el susto de empezar en esta aventura bloguera, ya me siento al menos capaz de comentar, creo que se puede escribir sobre casi todo, pero el que huela a colonia fresca y no a prefabricado se agradece.
Cada uno decide lo que leer, lo que comentar. Yo también prefiero un silencio a que me confundan un texto en prosa con un poema, por ejemplo.

catherine dijo...

¿Qué puedo escribir yo después de vosotros escritores? Que ayer decía a Amando que da una estructura, una arquitectura a sus palabras, pensando yo que la arquitectura es un arte.
Evaasecas, a menudo tengo que consultar el diccionario...

la palabra en cierne dijo...

Una objeción: lo que escribes carece de caducidad.

Alena.Collar dijo...

Ay, sí.
De acuerdo con evaasecas y con Marian.
Pero además, requetecompletamente de acuerdo.
Por una parte el que llega y después de que una (en este caso yo) le ha dado vueltas (al menos algunas vueltas) al coco, para poner algo mínimamente de interés, o que al menos llegue a quien lee, y viene el típico "qué bueno...mira mi blog".
Hombre/mujer...váyase a esparragar...
Por otro lado, los blog que parece que se la cogen con papel de fumar. Coñe, que son tan importantes, tan "reponidos", tan solemnes que parece que si dices "oiga, y ¿qué coñe ha querido usted decir?", te van a mandar a los municipales...
Y sin embargo, a mí me j(fastidia...) mucho más lo primero.
Igual que lo de escribir sobre un tema y que me salgan por los cerros de Úbeda; como si por ejemplo en este post de Amando el comentario que yo hiciera fuera de este jaez: "Amando, qué chuli, hoy me he comprado unos zapatos".

¿Me quieren decir qué carambaina tiene que ver con el tema a tratar?...
Confieso que en mi blog cuando llega un comentario de esos va al "trash". O sea, a la papelera de los comentarios basura.
Borde que soy...

Flamenco Rojo dijo...

Amando, ¿cómo está el tiempo por Segovia? Por Sevilla un día stupendo…Es broma eh, era para hacerle el juego a Alena con lo de yo te hablo de futbol en el post y tú me lo comentas hablándome de las lentejas que hacía tu abuela. Eso es muy normal en ciertos blogs por donde pululo, en particular en el, tantas veces aquí comentado, de JC. Aquí nos conocemos todos y no haría falta recordar que los amigos de Pavesas se leen hasta los comentarios…Con cierta frecuencia leo una entrada de algún blog y no se me ocurre nada que decir que aporte algo…callo entonces…Y como a partir de este momento sólo voy a escribir tonterías en este comentario, corto y cierro hasta el próximo.

Un abrazo y buen fin de semana…que me voy pa la Sierra de Cádiz.

Alena.Collar dijo...

Jajajajajaja....
Por seguir con la broma ( y demostrar que aquí nos leemos todos):
Mi perro se está echando una siesta que para qué, subidito en mi cama...

Bueno, después de esta manifiesta bobada que he puesto, decir que yo también soy de las que si no encuentro algo mínimamente lógico que decir prefiero callar a decir una bobadita.
El ejemplo de las lentejas me ha encantao....
¡Ah!, y que propongo crear un club virtual que se llame: "Los Amigos de Pavesas", que me ha gustado la idea.

Isolda Wagner dijo...

Después de leer ayer el artículo en cuestión, me vino inmediatamente un nombre que no diré, pero que todos conoceis del blog de JC. Me preguntaba siempre, como podía aguantar, la no mencionada, carros y carretas y seguir y seguir y seguir posteando, hasta la saciedad. Ahora lo entiendo, hay que ser muy pobre de espíritu para ganar el sueldo que gana una asistenta en tres horas de trabajo digno y útil. Lo que hay que ver!

Alena, que el club virtual existe, no lo dudes. Eva, no sé cómo de asustada empezaste en esta aventura, pero creo que nadie lo ha notado. Eres de las que cuentan la realidad, que a fin de cuentas, aunque parezca lo contrario, es donde nos movemos. A Marián, ella lo sabe, la leo siempre, pero me resultan difíciles sus versos, con el tiempo aprenderé.
Besos a todos, viendo la desesperanza de Haití.

Flamenco Rojo dijo...

Ma´punto al club virtual "Los Amigos de Pavesas".

María A. dijo...

Yo también quiero formar parte del club -virtual o no- de "Los amigos de Pavesas"....
Y que mal pagado está el personal...pues casi se gana más haciendo quesos...que acabo de hacer uno... gratis.

Anónimo dijo...

En estos tiempos hay que escribir por simple amor a la letra. No hay de otra.

Un placer leerte.

Amando Carabias dijo...

Mercedes:
Como imaginaba, de acuerdo al cien por cien.
El problema es que, como sabrás mejor que yo, este mundo -bueno como el mundo en su conjunto- es tan intrincado y tan selvático que lo nuestro, a lo mejor es demasiado utópico.

Amando Carabias dijo...

Evaasecas
Fíjate, que me parece que no es sólo en este tipo de blog en donde se hacen visitas de cortesía. Más de uno perfectamente asequible a cualquiera, se parece a la llegada al trabajo cuando saludas a compañeros que desempeñan su tarea en otra dependencia diferente a la que tú estás: buenos días, ¿qué tal?, Bien. Hasta luego.
Usar el diccionario no es ninguna vergüenza. Hay veces en que quienes escribimos tenemos que rescatar alguna palabra del olvido o el desuso.
Lo de tirarse desde el ego, lo había oído con los escritores en general. Es más algunos han escrito que los escritores desayunan egos revueltos todas las mañnanas.
Cada blog es un mundo y cada blog tiene una finalidad más o menos determinada.
Creo que de los tipos de blog a los que te refieres, o en los que normalmente participamos o vienen a participar, no tienen nada que ver con los otros a los que me refería en la entrada. Aunque algunas cosas se pueden extrapolar, desde luego.

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Será cierto cuando dices que tienes que usar el diccionario, no seré yo quien lo discuta, pero desde luego en el de los piropos eres una experta maestra consumada.
Muchas gracias.

Amando Carabias dijo...

Palabra...
Hablando de expertos en el piropeo.
No, la verdad es que no.
Sólo son perennes otras letras de otros grandes. Y sólo el paso del tiempo (del mucho tiempo) es quien dictamina quién fue caduco creyendo ser eterno, y quien permanece pensando que escribía crónicas de actualidad.
Eso no es cuenta nuestra.
De todos modos muchas gracias.

Amando Carabias dijo...

Alena Collar:
Como he dicho a ambas, tienen razón, por tanto tú la tienes. Obvio.
En alguna ocasión hemos hablado sobre este asunto de la moderación de los comentarios. Casualmente cuatro de las que habéis intervenido aquí (Marian Ramentol, Evaasecas, Palabra en cierne y tú)tenéis habilitada la moderación de comentarios, mientras que Mercedes, Salvador y yo mismo (sólo cito a quienes hasta ahora se han pasado por aquí y tienen su propio blog) no hacemos uso de tal opción.
Y sin embargo a todos nos ocurre lo mismmo. En los siete blogs, casualmente, hay poco de comentario insustancial, de pura cortesía.
Y no creo que seas borde, simplemente tienes una idea sobre tu blog y la poenes en práctica. A eso le llamo yo coherencia.
Por cierto las lentejas riquísimas y los zapatos de cine...

Y luego están las derivaciones.
Sobre ese asunto aquí se sabe un poquito.
Quizá sea el riesgo cuando las entradas se actualizan con relativa calma. Si se ha creado cierto ambiente de confianza entre los comentaristas, ocurre como en todas las sobremesas de las mejores familias (cuanto mejor sea la familia -utilizo mejor en el mejor sentido de la paalabra-, más digresiones, acotaciones, comentarios, paréntesis, interrupciones hay... Y de vez en cuando alguno pregunta, ¿Por cierto alguien se acuerda por qué ha salido esto?

(Sobre el CAP, luego contesto).

Amando Carabias dijo...

Pepe Gonce:
Que lo disfrutéis.
Es mejor el silencio, sí, mucho mejor el silencio que decir nada o poco, y si encima se va con intenciones torticeras, ni te cuento.
De todos modos, como acabo de decirle a Alena, todo esto depende del grado de confianza que se haya generado entre los contertulios.

Amando Carabias dijo...

Isolda:
Cuando alguien necesita de esa caridad para vivir, es necesario aguantar cualquier cosa.
Y ya que sacas la cuestión, como en más de una ocasión he dicho, quien insulta normalmente no ofende (o no me ofende) se autoretrata, que es bien distinto.
Más arriba se han ennumerado algunos tipos de blog en función de los comentarios. Y se habían olvidado de esta clase, el que vale todo, el que puede resultar incluso repugnante abrir los comentarios del lector medio. Estoy seguro que cada día más, hay blog que los comentarios sólo los leen quienes comentan. Mientras que en otros (y no me gusta señalar) lo que más atrae son los comentarios.
Y tengo muchas confesiones al respecto.

Amando Carabias dijo...

María A:
La verdad es que también pensé lo mismo al leer el artículo. Si por una entrada como esta que comentamos se le abona al autor un euro, es preferible hacerlo gratis y no depender de ningún jefe, o ser tú mismo el jefecillo del asunto.
Como no leo blogs de ese tipo (que yo sepa, claro), sino que normalemnte frecuento los de los francotiradotes, como uno mismo, desconozco el tipo de post que escriben. Quiero decir, si es un folio, o medio folio o un párrafo.
Más de un folio es complicado, porque en esa extensión está fijado -por los expertísimos en el asunto- el límite habitual de aguante del lector medio de internet.
Es decir la entrada de hoy me la hubieran recortado.
Otra razón más para ser mi jefecillo.
Quien no ha aguantado, no lo ha leído y ya está.

Amando Carabias dijo...

salvadorpliego
Como siempre que lo haces, gracias por tu visita a este rincón y gracias por hacer acto de presencia pública.
Tienes razón, precisamente más que nunca, hay que escribir porque se ame la palabra, porque cada día se utiliza más por otros motivos bien distintos.
Tú, sin ir más lejos, das ejemplo de ese amor por la palabra al facilitar gratuitamente tus textos a quien los quiera leer e incluso difundir.
Eso es gratuidad, sí señor.

Evaasecas dijo...

A ver, por partes, que esto está super interesante.
El tema del diccionario, claro que lo uso, era una ironía sobre esos textos tan rimbombantes que te encuentras por estos mundos blogueros y que son especialistas en no decir nada, pero eso sí, ese vocabulario...inmenso. Suele coincidir con textos largísimos, que dejo de leer cuando no entiendo la tercera palabra, ni siquiera en su contexto; a eso me refería con lo del diccionario.
Respecto a mi "entrada" acobardada en este mundillo, es, algo así como mi estreno con la poesía, más o menos obligada y con poco acierto a la hora de las imposiciones en el colegio. Simplemente, imagino, que no di con el poeta adecuado, así como no dí con el blog adecuado cuando llegué. Lo que pasa es que esto me ha pillado con unos pocos años más y he reaccionado.
Los comentarios... hay quien tolera comentarios absurdos solo por tener comentarios. No a cualquier precio. Mi blog es algo así como mi casa y en mi casa hay unas normas.
Perdón por la extensión de hoy, se me olvida decir que ignoraba el tema de los blogs pagados y supongo que algo tendrá que ver con los "egos revueltos", jajaja, me encantó la expresión, no la conocía.
Ahhh, y por cierto,... yo también me apunto, con la venia.
Abrazos a todos, este blog es la caña, y va en serio.

Amando Carabias dijo...

El Club de Amigos de Pavesas, en adelante CAP, se considera fundado desde el 18 de noviembre de 2009 en que este blog comenzó su andadura.

Mejor dejémoslo así, sin más formularios, requisitos u hornacinas.

El CAP para su mejor funcionamiento ha de carecer de normas, formularios, listas y activades.

El CAP existe en tanto en cuanto existís vosotras y vosotros que tenéis a bien acercaros aquí y regalarnos vuestro tiempo, vuestra experiencia y vuestra sapiencia.

Amando Carabias dijo...

Evaasecas
Pues a mí, en principio, la extensión no me echa para atrás. Me echa para atrás que no se diga nada, que no quiere decir que el problema sea mío. Quiero decir, que a lo mejor algo no te dice nada, porque hay que esforzar un poco la sesera y uno no está para esos trotes.
(Sobre el esfuerzo de lector también habrá que hablar algún día. En la agenda lo tengo...)
Si no te he entendido mal, empezaste con la poesía porque te obligaron en el colegio (¿a qué a leerla, a escribirla?).
En mi caso me obligaron a escribirla, y aquel día descubrí el sentido hondo de mi vida. (Perdón por la cursilada). Lo que aquella mañana de sábado de febrero (que es cuando me puse a escribir mi primer poema) sentí entre mis dedos y el corazón fue tan absolutamente demoledor y maravilloso que desde aquel día suspiro por esto mismo que he escrito hoy.
Me emociona la valoración que haces del blog.

María A. dijo...

Esta tarde, tenía que haber ido a la conferencia de uno de nuestros escritores más conocido y reconocido de nuestro panorama literario. Muy vinculado con este país, donde, además de residir a temporadas, tiene gran poder de convocatoria. Ha generado tal expectación que había invitaciones con asiento y de pie... Yo tenía una de las primeras pero, por lo que le conozco, es de los que ¿cómo decís? salta sobre su ego. Uf...y reconozco que me gusta como escribe... y sus artículos en diario de gran tirada...pero no, decidí no ir. Con tanta gente, seguro que se ha subido a la parra y ¡a saber qué perorata ha soltado! Mañana me contarán... He optado por quedarme a leer apaciblemente lo que escriben otros escribidores más cercanos... y a marujear... je,je...

Gaspard dijo...

Mi faceta bloguera ha durado demasiado poco, por mi hábito de comenzar muchas cosas y dejarlas a medio hacer, por el gusto a probar cosas nuevas...y también porque este año (y los siguientes, hasta que la salud lo permita), viajo mucho. Además, no creo que tenga mucho que decir como blogger.
La otra faceta, la de entrar en blogs, la descubrí va a hacer tres años en mayo. Fue por casualidad, por un link que apareció en la portada de 'El País' sobre las elecciones presidenciales de 2007. Me interesó la temática del blog, la posibilidad de debatir y el poder mantener una relación de trato casi diario con gente a la que acabas apreciando. Desgraciadamente, ese blog se lo cargaron y borraron comentarios publicados con la mejor de las intenciones. No he vuelto a ese foro ni pienso hacerlo. Luego, pasé al blog de en frente, el de JC, donde se habla menos de política y mucho más de cultura, y creo que gané en experiencia, en riqueza. Ya no creo que la discusión y el debate vayan a reportar nada, aparte de la decepción con el comportamiento de algunos "conocidos". Ahora sólo entro en ese blog, y cada vez menos, para decir lo que pienso y nada más, sin afán de descutir. ¿Para qué? Y at last, but not the least, por último, pero no menos importante, este blog que conocí desde el de JC. También intervengo menos aquí, pero supongo que es natural. Nada dura para siempre, todo lo que sube baja, el fútbol es así, son 11 contra 11, etc.

maririu dijo...

¿no sabéis lo que es "un nègre" en literatura?
nègre es la palabra llena de desprecio de los racistas ya que negro es noir.
Es el que escribe pagado para que se publique con otro nombre.
Internet es como todo es un reproductor de la sociedad y pueden ser blogs para las marcas comerciales, los laboratorios, los coches, la publicidad....
La sociedad... existe ...!!!
con todas sus dialécticas contradicciones, valga la redundancia y ya se pueden hacer esfuerzos individuales que la sociedad se los tragará si pueden transformándolos en beneficio propio es decir de unsos pocos.

Amando Carabias dijo...

María A:
Das tantas pistas que se hace difícil no imaginar a alguien en concreto. Pero no termino de caer, no, no me doy cuenta... Es broma, es broma...
De todo lo que dices me choca eso de las invitaciones de pie. Me hace gracia. Invitarte para estar de pie será sólo porque han calculado la capacidad del aforo, incluso sumando quienes estén apiñados por los pasillos, y así eviten un tumulto a la entrada del local, si lo hicieran utilizando la famosa frase: Entrada libre hasta completar el aforo.
¿Hablas de un escritor, no de una estrella del rock?
Ahora en serio, la verdad es que tiene mucho poder de convocatoria, se ha convertido en uno de los referentes literarios, culturales, morales y políticos. Hay quien ya ha abogado por el Nobel, porque parece claro que el Cervantes no se lo llevará...
Si los escribidores más cercanos son los que tardan dos meses en llegar porque les pillan las mudanzas, leer es lo mismo que marujear...

Beatriz Ruiz dijo...

Bueno, pues yo hoy soy de las que no sé que decir... ya vosotros habeís dicho todo (que lo he leído)...

Cuando empecé a entrar en blog si pasaba por esos de hola, tomaste café???... adiós... pero ahora tengo bastante limitado el tiempo que dedico a estos menesteres. Asidua del CAP (del que espero formar parte), de Alena, de María Sanguesa... ahora conocí aquí a Evaasecas, leo a Maririu... y un par de ellos más que visito de vez en cuando. Pero tengo que reconocer que algunas veces vuestras entradas me vienen grandes, yo no soy ninguna experta en letras...

Me muevo mucho más en mis temas... y por tanto le dedico mucho tiempo, leo artículos y noticias que nada tienen que ver con la literatura...

Pero estoy encantadísima de leeros por supuesto... y a todas estas... digo que os conocí en el blog de J.C., así que incluso ese espacio ha servido para algo...

Vaya... y no tenía nada que decir!!!...

Luce el sol, me voy a hablar un rato con las plantas...

Amando Carabias dijo...

Gaspard:
¿Intuyo que Le Quai d'Orsay, además de necesitar invitación para acceder a él, además de no haberse renovado últimamente es que lo has jubilado?
Pues es una lástima. Y es una lástima porque discrepo hondamente cuando afirmas, y copio y pego tus palabras: "Además, no creo que tenga mucho que decir como blogger." Que me hables de salud, de viajes, de falta de apetencia, que no te convenza el sistema este de los blog... Eso, y supongo que más cosas, son indiscutibles. Pero esa frase que rescato es imposible. Por lo poquísimo que sabemos de ti en este rincón, no es admisible en cuanto a su contenido. Como por otra parte sucede con tantos otros de los amigos que no llevan blog.
Me decía un amigo bloguero que también tiene épocas de retiro espiritual, que esto de los comentarios en los blog es algo curioso. Un día entras en un blog por lo que sea, y te apetece comentar y lo haces. Parece que te hacen caso y vuelves al día siguiente, y así sucesivamente. Pero de pronto, no sé, un viaje, una enfermedad, falta de tiempo, una avería en la red, en fin, cualquier cosa, y dejas de entrar unos cuantos días, y esos días son semanas y luego meses... Los blog en sí mismos son efímeros, aunque permanezcan años pululando por la red, y los participantes, obviamente.
Por lo que a mí respecta, en Pavesas eres uno de los fijos, aunque como en los tipos de contratos laborales, te podríamos llamar fijo discontinuo.
Tus palabras son siempre una luz que me aporta más cosas de las que parecen a simple vista.
Pero, efectivamente, fútbol es fútbol, y aquí no se juega el partido que más te atrae.
Ahora, que de vez en cuando nos pongas los dientes largos con tus viajes, será agradecido, más que nada porque se demostrará que tu salud sigue en franca mejoría.

Amando Carabias dijo...

maririu:
De ese color hablaba, efectivamente, en una parte de la entrada, pero en la zona en que me refiero a los escritores más tradicionales y más importantes. Es una vieja tradición literaria, y muchas obras tan vastas, según algunos, sólo se explican desde esa situación de 'explotación' a la que se someten algunos.
Claro que hubo épocas en que el asunto, en cuanto a los pintores y escultores, se solucionó creando la figura de "obra perteneciente al Taller de...". Quizá fueran rudimentarios esbozos de lo que hoy son pequeñas industrias.
Quizá fuera más honesto, también en literatura, hacer esto y distinguir las obras que se deben en exclusiva al autor, y las que son factura de su estudio.
Como bien dices, (y siempre lo he sostenido), aunque parezca lo contrario, internet no es más que un reflejo del mundo, quizá a más velocidad y sin proximidad física, pero a la postre cualquier cosa que se nos ocurra a los humanos, suele ser un reflejo de nosotros mismos, como no podría ser menos.
Y al final las relaicones económicas mantinen las mismas reglas.

Amando Carabias dijo...

Beatriz.
Espero que la conversación con las plantas haya sido ilustrativa. Ellas no saben tanto de miserias, injusticias, pobreza, dolores, etcétera.
Que formas parte del CAP está clarísimo. El CAP está formado por quien quiera serlo, sin más, aunque no lo diga, aunque no intervenga, aunque intervenga poco. Querer ser del CAP, quiere decir que Pavesas os gusta y ese es el único requisito.
Que mis entradas te vengan grandes.
No, Beatriz, eso es imposible, no estoy nada, pero que nada de acuerdo.
Lo que si nos viene grande, pero es necesario, es la capacidad para la denuncia que tú tienes, y la enorme capacidad para la solidaridad.
Un beso.

lammermoor dijo...

(...)¿Ha visto los carteles de sesenta metros que hay fuera de la ciudad? ¿Sabía que hubo una época en que los carteles solo tenían seis metros de largo? Pero los automóviles empezaron a correr tanto que tuvieron que alargar la publicidad para que durase un poco más.
(Bradbury, Ray: Farenheit 451)

Amando Carabias dijo...

Lammermoor
Ahí estamos. Ese es el futuro.
Gracias por llegar aquí, gracias por esta aportación y bienvenida a este rincón. Quizá sea la única explicación posible. Se necesita vender y vender y vender...

lammermoor dijo...

No he podido resistirme, al leer tu entrada me vino este fragmento a la cabeza.
Ahora intentaré comentar-contestar a todos. En mi caso tengo claro que el blog es una afición y además quiero podere decir lo que me apetezca y sienta; por ese motivo no quiero depender de un periódico, revista (tampoco me han llamado), ni siquiera admitir publicidad.
Tampoco me gustan los comentarios o las peticiones tipo "me gusta tu blog; te enlazo y tu me enlazas" Pues no, si te gusta y me quieres enlazar estupendo. Y por mi parte, si me gusta el tuyo, hablaré de tí o te visitaré independientemente de que tu no lo hagas.
En cuanto a los comentarios ajenos, reconozco que en algunos de los que visito -incluido el mío-sucede eso de que a veces hablamos de cosas ajenas. Pero es en parte porque hemos ido cogiendo confianza y haciendonos amigos y, como en una conversación cualquiera, a veces al hablar te alejas del tema inicial. Aunque comprendo que para alguien no habitual puede resultar extraño.
En cuanto a la caducidad de las entradas, espero y aspiro a que las que escribo (o la mayoría) no lo sean.

Amando Carabias dijo...

lammermoor:
Sí, la verdad es que es un poco rollo lo de tú me enlazas, yo te enlazo, el se enlaza, nosotros nos enlazamos... Oé, oé, oé...
Sería bueno eso de un poco más de personalidad, y si voy a tu blog porque me parece bien y allí me quedo y te sigo y comento de vez en cuando (cuesta empezar a comentar, pero cuando se le toma confianza al asunto...), eso no quiere decir que tú tengas que hacer lo mismo, o a la inversa.
A mí me pasa lo que a ti, tampoco me han llamado de ningún periódico, revista..., y tampoco quiero publicidad en el blog. No sé qué rédito se puede sacar del asunto, pues ni siquiera me he preocupado una décima de segundo en plantearlo. De hecho, los blogs que la tienen no me apetecen mucho.
Sobre los diálogos, por ejemplo, fue divertidísimo y gratificante, seguir el que mantuvistéis en el tuyo respecto de Monet. Y uno notaba que allí había también mucha camaradería y admiración mutua. Un poco como sucede aquí.
Y ya sabes, como le digo a todo el mundo que por aquí aparece, ya tienes tu sitio reservado, y para las asturianas siempre es especial, pues ya me considero un poco adoptado por esa tierra.

María Eleonor Prado Mödinger dijo...

Me divertí mucho porque lleva mucha razón, de repente parecemos como especialistas en marketing y hacemos del espacio un telón continuo de avisos, pero quién no cae al principio en eso, todo se va desinflando con el tiempo y queda en la retina aquellos textos que fueron memorables. En los blog encuentras de todo y me da pena ver a escritores estupendos mezclados con escribidores de postales de amor. Pero así es la vida de la literatura. Hace poco leí una invitación a poner textos en una liana sujetos con esos ganchos para ropa y dejarlos al la intemperie para fulano y zutano los leyera.
Creo que la forja debe ser lo más pulida que se pueda, tratar de borronear cuantas veces sea posible, dejar fraguar la tinta y volver un día y releerla, y así hasta que se acerque a lo que quisiste hacer al principio, pero estamos en una vida apurada donde necesitamos al parecer los afectos de inmediato. Nunca he leído en los comentarios de blog alguien que te diga por ejemplo, no, mo me gustó tu escrito, está mal planteado, los tiempos verbales están mal usados, tienes mala ortografía, en fin. Nunca he leído eso y por qué?, jajajaja, sabes por qué?, no porque no se hagan sino porque gran parte de nosotros administramos primero lo que entra y luego le damos el visto bueno, no es así?...de esta forma nos aseguramos de no sufrir un impacto, de quedar en vergüenza.
Debiéramos escribir a sangre de pato y recibir como se dice en mi país, la "dura", aquella crítica que se hace con todos los sentidos puesto en la intelectualidad, porque las letras forman parte de eso, de la intelectualidad y hoy no se respeta, hoy escribe Pedro, Juan y Diego sendos diarios de vida que no forman parte de nada, no se acercan a la lírica, no es narrativa y menos prosa, es un conjunto de aspectos que decantan en collares estéticos, coloridos y de masivas cuentas...son pocos los que dejan bueno y el alma llena de arte...¡ya!, me volé y a lo mejor no digo nada...me perdonarás.

Un abrazo amigo

Ventana indiscreta dijo...

Amando, sedimentémonos en la escasez, en el círculo que nos rodea, en nuestro pequeños lectores. Disfrutémonos. El resto es vorágine. Dudo que hoy día muchos de los grandes antiguos hubiesen triunfado a pesar de su contrastada calidad. ¿Quién lee hoy a un Dostoieski frente a la basura comercial? Me importa un coño todo eso. Me restringo al placer de los que conozco y a los nuevos que merecen la pena. El resto es efímero: como decía Gilles Lipovetsky en su hermoso libro; 'El imperio de lo efímero'.

Besos.

la palabra en cierne dijo...

Me apunto al CAP. Si no me he muerto antes, claro.
Besos.

Amando Carabias dijo...

A partir de las 00.01, el capítulo XXIII de "Mañana amanecerá", en mi otro blog "Euritmia en la red".
Su dirección electrónica es http://euritmiaenlared.blogspot.com/ También se puede enlazar desde este propio blog o desde aquí mismo

catherine dijo...

¡Qué apasionante! Hasta Ventana que cita a Lipovetsky que compra sus quesos en la misma tienda que yo. No hablo con él, pero sé que sus libros son interesantes, sociedad y/o cine, consumición, moda... era profesor de filosofía, quizás habla más de sociología.
Muchos besos para la semana entera, que mañana me voy a contemplar más nieve.

Amando Carabias dijo...

María Eleonor
Efectivamente a veces procuramos sin saber mucho, también parecer expertos en publicidasd y mercadotecnia. La vida de la literatura, en general en el arte, siempre ha sido así. A la postre, salvo los grandes genios, sólo el tiempo ha deeterminado la calidad de los escritores.
Sobre la 'dura' que dices, en este blog no se establece esa moderación a la que te refieres.
Ya hemos comentado algo al respecto un poco más arriba; pero en general, todos decimos que admitimos la crítica, y normalmente es complicado de aceptar. No creo que quienes tenéis establecido la moderación de comentarios lo hagáis para eliminar críticas, si es que éstas son vertidas sin insultos o cosas así. En general creo yo, la moderación se establece para eliminar los posibles insultos, discusiones, maledicencias, etcétera...

Amando Carabias dijo...

Ventana...
Deberías registrar eso de SEDIMENTÉMONOS EN LA ESCASEZ, EN EL CÍRCULO QUE NOS RODEA. Me parece absolutamente genial y realista.
Cómo se nota que andas bien enraízada en la realidad, que la fotografía y la poesía te han hecho comprender el mundo de una manera especial, tan honda.
Sí, hay que disfrutar de lo que se hace, en el fondo es lo que vengo a decir en esta entrada. No merece la pena escribir por escribir, juntar palabras por juntarlas, al final ¿para qué?

Amando Carabias dijo...

Palabra...
Ya sabes lo que he dicho más arriba. Así que también eres del CAP.

Amando Carabias dijo...

Catherine
O sea que eres vecina de un importante. Y tú sin avisarnos y sin interceder por los pobres escribidores de Castilla...
:)
Le puedes decir cuando vuelvas de tu viaje a la montaña y vayas a comprar queso que en cierto blog se ha comentado su obra...

Amando Carabias dijo...

Ventana...
Por cierto (las neuronas ya me funcionan al ralentí) se me ha olvidado comentar que estoy completametne de acuerdo en lo que dices sobre las lecturas de literatura y bodrios comerciales. Más aún, sé de ti, porque te conozco, que cuando lo dices estás describiendo un amor tuyo muy grande, extremo (de los mayores que conozco) a la poesía y a la literatura.

catherine dijo...

El C.A.P, no me lo merezco. En francés es el Certificado de aprendizaje profesional, quizás el certificado mínimo: no me lo merezco en cuanto a la escritura, ni en francés ni en castellano por escribir muchas tonterías que me vienen a la mente.
La admisión al club C.A.P me gustaría mucho.

Alena.Collar dijo...

Por seguir dando la tabarra:
Yo en mi blog modero los comentarios. Ahora bien, nunca se me ocurriría censurar un comentario que me dijera razonadamente que no está de acuerdo con una opinión mía, o que algo que he escrito no le ha gustado y me diera sus razones.
Pero no apruebo la maledicencia, ni los comentarios hechos para herir.
Doy un ejemplo: es muy distinto decir: "No comparto tu criterio, yo creo que tal opinión es matizable, y para mí esto es así y así", a decir: " Si fueras más inteligente entenderías lo equivocada que estás y no dirías esas tonterías".
En el primer caso me están aportando-a mí y a los blogueros- una opinión a valorar.
En el segundo ni a mí ni a los blogueros nos aportan nada. Pero no porque me quiera "zaherir" o no, sino porque traspone lo que debe ser una crítica al articulo o lo que sea, a una crítica personal, que en ningún caso interesa.
No sé si me explico.
Tampoco me gustan nada los comentarios como yo digo, "tipológicos", en el otro extremo: "qué bonito. Cuánto me ha gustado". Mire usted, seré pedante, pero si no pensara que podía interesar no lo hubiera puesto...
Besos....
(Y perdón por la lata)

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Oficialmente, en España, el CAP, también existe o existía y significa o significaba Curso de Adaptación Pedagógica. Se usaba para que los titulados universitarios, pudieran acceder a dar clases en la ensañanza inferior que, como es bien sabido, requiere de una serie de estrategias pedagógicas y didácticas especiales.
Respecto a tu autocrítica sobre el uso del idioma permite que discrepe con una sonrisa, pero muy seriamente. Mucho.
Pues que yo sepa eres de las más veteranas en el CAP.

Amando Carabias dijo...

Alena Collar
Yo creo que sería capaz de hacer lo mismo, pero reconoce que es una tentación muy grande, hay que ser muy objetivo y valiente. Es una tentación muy grande poder evitar una mala crítica, sólo con no publicar, más que nada porque sería muy humano. A la larga sería pernicioso, pues te estás cargando a un seguidor/a, ya que será difícil que vuelva por ese blog si se siente amordazado, pero a veces hay críticas que sin ser insultantes son destructivas. Y eso es difícil de soportar, e incluso de consentir.

K dijo...

Cincuenta y tantos comentarios dan la temperatura exacta del grado de interés que suscita el tema que se ha propuesto.
Me satisface mucho más leerle en verso y que componga sin sentir la necesidad de tener fiebre.
Es inevitable no cogerse un rebote cuando se leen ciertas cosas referentes a blogs que en su día fueron maestros de otros que hoy presumen de calidad en las entradas y en los comentarios..pero mejor es dedicarse a robustecer el intelecto con interesantes lecturas y dejar que la mente sea un camino abierto a todos los pensamientos ,que autoprocurarse un jamacuco por las chorradas que se puedan escribir en cualquier punto de la geografía de este subacuático mundo.

Por supuesto que no me he leido todo el termómetro ( ya me lo dosificaré porque algunas opiniones tienen su enjundia y otras mucha "grasia") pero una cosa se hace evidente :
"Sólo el blog propio es el que reune las características marcadas para ser el auténtico blog y los demás no valen un pimiento"
Sorprende saber que si en algún otro personalidad y estilo quedan plasmados en meandros y urdidumbres de imagenes ,colores y ricos vocablos , resulta que No valen el desperdicio de un figo porque No dicen nada o porque resulta muy molesto acudir al diccionario para entender lo que No leemos .
Curioso.
En mis tiempos para adquirir cultura y conocimiento era de obligado cumplimiento disponer de un diccionario pegadito a la lectura de turno. Claro que era mucho más fácil leer a Corin Tellado y no tener que estrujarse el cerebelo en interpretaciones y conjeturas , pero eso se dejaba para el entretenimiento .
Un buen blog ha de ser mucho más que evasión o entretenimiento . Como de todo hay en la viña del Señor ,habrá también quien busque riqueza intelectual y meditación ¿ no?

Existen blogs con inquietudes innovadoras que rompen con la norma dialéctica que se impone en los corrillos de moda , y eso no quiere decir que sean mejores ni peores ,sino diferentes . Y todo lo diferente , choca casi tanto como triunfa. No quiero decir que "diferencia" sea sinónimo de calidad , pero al menos hay intento de ofrecerla rompiendo moldes y normas y creando como en verdad le dicta su conciencia .
Sería una lástima que cualquier día los buenos blogs cayesen en manos de profesionales que se dedicasen simplemente a rellenar espacios de mensajes planos sin belleza ni espontaneidad alguna . Ya se nota en algunos el abandono .
Significaría su muerte ,o se verían reducidos a otra cosa que lo que han venido siendo y no quiero ni pensarlo , porque para mí un blog es ante todo intercambio y COMUNICACIÓN .
Se ha hablado de contenidos y de blogueros profesionales que cobran mensajes a euro , pero ¿qué me dicen de los blogs en los que los titulares se contestan a sí mismos ?
¿ No es eso un absurdo?
He tenido blog y seguramente que será muy malo porque sólo me visitaron mis musarañas en tres años , pero jamás se me ha pasado por la cabeza fabricarme avatares y respuestas para engordarme el ego.
Escribo como escribo , siempre intentando echar fuera lo que no se puede quedar dentro .
Por puro placer .

K dijo...

El señor titular de este blog puede borrar lo que estime oportuno.Faltaría más! Lo entendemos.
Eso sí, opinar en ninguna parte del mundo se ha hecho nunca con molde . Bueno sí, en aquellas que vos y nos sabemos y que seguramente hemos condenado siempre porque seguramente compartimos la hermosa visión de que la palabra es libre ,y sobre todo respetable, si no se cae en lo soez y de mal gusto ( insulto, descalificación y patatís ,patatús..)
Nadie puede opinar con las palabras de otro, eso es evidente , y resulta muy hiriente que siempre se parta del prejuicio de que quien escribe lo hace con esa intención tan sólo porque lo que se lee sea verdad o no guste.
Por supuesto que también puede borrar por puritito deseo de hacerlo ( expresión que en este caso omito por hallarme en el exquisito sitio que me hallo) pero en ese caso , por favor, prescinda de escudo y ponga AVISO .

Amando Carabias dijo...

K I y II:
Como a todos cuantos por aquí dejan su aportación le agradezco sus palabras y le doy la bienvenida a este rincón, puesto que, que yo recuerde, es la primera vez que nos deja por escrito su opinión, que expresada en términos tan correctos nunca será borrada por mi parte, pues no hay nada en su intervención que insulte, maldiga, etcétera. Además, como usted, no suelo prejuzgar las intenciones que provocan la escritura de nadie, y como uno no busca herir con sus palabras, nunca pienso que haya nadie cuya primera intención sea precisamente esa, la de herir. Aunque a veces resulte que así es; pero, como no es su caso, no tengo nada que borrar de lo que antecede. Es más, puedo decir que en estos catorce meses de vida de este bloc cibernético (a parte de algunos comentarios míos y algunos comentarios duplicados) sólo he tenido que borrar tres comentarios (al menos que recuerde), uno de ellos era un spam procedente de una empresa que se dedicaba a la venta de productos deportivos y otros dos porque insultaban, además de modo rastrero y torpe, a otros tantos contertulios, ni siquiera al titular. Como bien supone, creo que cada quien opina según su propio criterio y creo firmemente en la libertad de la palabra, más aún, creo firmemente en que el contraste de pareceres aporta y enriquece. No suele ofenderme una crítica, porque soy el primer inconformista con mi tarea y siempre pienso que todo es mejorable. Quienes me conocen de más cerca, pueden atestiguar que molesto bastante a mis amistades solicitando opiniones, porque casi siempre me parece que lo que hago debe ser mejorado.

Me alegra saber que le gustan más mis versos que mis prosas. De los poemas de este blog estoy contento, hasta donde mi inconformismo me permite estarlo. De hecho, como puede comprobar por uno de los billetes que he situado en la columna de su diestra, han pasado a formar un libro, “Versos como carne” que espera ser publicado un día. Y no es la primera opinión la suya la que viene a insinuar que los poemas, quizá, sean lo más sólido de todo este conjunto de aportaciones o disquisiciones.
Dicho esto, por el contrario, le puedo asegurar que no compongo con fiebre, salvo cuando lo hice bajo los efectos de una faringitis que me ha traído a mal traer durante los días navideños. Pero entiendo que no se refiere usted a esa fiebre.
Es cierto, no se lo discutiré, que hay algo de obligación o disciplina, llámelo como guste, que me impulsa a acudir a este lugar con la asiduidad de tres entradas por semana, sin que nadie me obligue a ello. Es probable que no le falte razón cuando intuye que de este modo no se avanza y la mente no se enriquece ni se robustece y se le niega la posibilidad de ser un camino abierto a todas las corrientes.
En lo que no estoy de acuerdo en absoluto es cuando afirma:
“Por supuesto que no me he leído todo el termómetro (ya me lo dosificaré porque algunas opiniones tienen su enjundia y otras mucha "grasia") pero una cosa se hace evidente:
"Sólo el blog propio es el que reúne las características marcadas para ser el auténtico blog y los demás no valen un pimiento".
Si estas palabras las dice en referencia a mi opinión sobre Pavesas y cenizas, he de decirle que está muy desencaminado. El hecho de que sea el blog que escribo, no quiere decir que para mí sea el mejor blog, ni menos aún que los demás valgan un pimiento. Es como si pensara (yo) que mi cuerpo es el mejor cuerpo y los demás no valen un pimiento, o mi casa es la mejor casa y las demás no valen un pimiento, o mis libros son los mejores libros y los demás no valen un pimiento… Ahora bien, le digo, estimado K, que es el blog que más quiero, como es a mi cuerpo al que más quiero y a mis libros a los que más quiero. Lo que ocurre es que es el blog que puedo hacer, es el blog que estoy construyendo poco a poco y que mejora, si es que lo hace, con aportaciones como la suya

Continúo más abajo. Parece que el espacio a los comentarios no es infinito).

Amando Carabias dijo...

K I y II:
(Viene de más arriba...)
Creo que sobre los diccionarios ha quedado clara mi postura. Dado que usted habla de que en sus tiempos era obligatorio tener un diccionario al lado para las lecturas, algo que comparto, apelo a su memoria para que recuerde cómo, también entonces, muchos protestaban por tener que abrirlo constantemente, y muchos aborrecen la lectura y los libros por tal circunstancia. Que estén en un error y que se hayan perdido tantas cosas, no quiere decir que se trate de una reacción que no sólo se corresponde con estos tiempos. Ahora bien, que quien escribe se tenga que plegar siempre a tales exigencias y para evitar esa crítica incapacite voces que conoce a la perfección, habla mal de su carácter. Siempre he sostenido que una de las misiones del escribidor es la de rescatar, limpiar y poner en circulación vocablos que el tiempo ha arrumbado en el desván del olvido, como si fueran cachivaches inútiles de la abuela. Pero tampoco se me olvida la máxima cervantina que en el prólogo de El Quijote aparece como uno de los consejos más sabios que nunca un literato dio a otro, su famoso escribe como hablas. Es en esa tensión, entre la riqueza y la naturalidad, donde entiendo (simplemente manifiesto una opinión muy personal) que se ha de mover la escritura. Porque, además, si es cierto que quien lee ha de molestarse un poco, no es menos cierto que quien escribe ha de facilitar la tarea dentro de unos cauces de mínima calidad. Creo que no se puede olvidar algo importante en todo esto, quien escribe lo hace por puro placer, no lo dudo, pero si, además se publica, es que se espera o se desea la existencia de lectores, luego no se puede convertir el texto en algo farragoso e inextricable y casi intransitable por las constantes visitas al diccionario.
Un buen blog, un buen programa de televisión, un buen libro, una buena canción, un buen cuadro, una buena película… Quiero decir cualquier manifestación pretendidamente artística o cultural ha de ser algo más entretenimiento y evasión.
Respecto de los blog que se salen de lo trillado, de lo sencillo, los blog que buscan nuevos caminos, que exploran en la creatividad, que aportan tanto y tanto, no tengo nada que decir, salvo que me parecen imprescindibles y que mis conocimientos informáticos por un lado, mi falta de tiempo por otro y mi falta de creatividad por otra parte me alejan de ellos. Su calidad es innegable y quizá sean la punta de lanza contemporánea que necesita el arte en general y la literatura en particular para continuar con su imparable carrera hacia delante. No sólo es inevitable, sino que es necesario su aporte de novedad y de reflexión. Y en esa diferencia, que sólo el tiempo, como vengo diciendo en los comentarios de hoy, decantará hacia la consolidación o hacia el olvido, se abre un camino necesario.
Es verdad que sería una lástima que los buenos blog cayeran en manos de profesionales, que se limitaran a rellenar espacios, y es verdad que se nota el abandono de muchos de ellos y es verdad que los blog, son instrumentos para la comunicación, pero no es menos cierto (y esto, en el fondo, es lo que pretendía denunciar el artículo de hoy) que mantener un blog, como sabrá por la experiencia que nos ha relatado, conlleva un esfuerzo al que no siempre se puede responder, es más, al que algunas veces dan ganas de tirar por la borda, si no fuera por el interés que manifiestan las aportaciones de los contertulios, como esta suya cuya respuesta voy concluyendo.

maririu dijo...

-pues entre K y Amando, nos habéis dado una nueva entrada de lo más interesante, de verdad interesantísima.
Me ha gustado mucho la definición de los blogs o de internet "este mundo subacuático" la hago mís, K, es decir la copiaré, con permiso.
No creo, Amando que K se refiriera a Pavesas cuando decía su opinión sobre "el blog propio" creo que hablaba en general y que estáis de acuerdo.
Lo que tiene de especial este blog Pavesas (siempre me olvido de las cenizas, no he encontrado ninguna o sólo las que sirven de abono) es lo atento que eres, Amando, podría resaltar lo buena persona lo cariñoso, lo agradable etc pero no, quiero subrayar lo atento.
Me explico podrías ganar tiempo, te lo hemos sugerido, pedido con una o varias respuestas colectivas pero no cada cual tenemos nuestra respuesta y damos cuenta que nos has leído yendo a lo profundo de nuestro texto o de nuestro ser. Estos es ser castellano viejo, hidalgo.
Yo sé que suelo manejar la contradicción, los franceses dicen "jeter un pavé dans la mare =echar un adoquín en el estanque" siempre pienso exagero pobre Amando pues lo hago con serenidad (relativa) porque tengo confianza "Amando encontrará la manera de decirmelo" si exagero digo.
Bueno feliz domingo y viva Pavesas y cenizas
Por cierto sé que Cathérine tiene y esde el CAP pero ya no me acuerdo de que son las iniciales

Isolda Wagner dijo...

Maririu, hoy me has gustado mucho; ya sabes que esto va como va. No tengo sino que corroborar tu comentario, de principio a fin. Se lo he comentado en privado, ha supuesto un valor añadido a Pavesas (a mi también se me olvidan las cenizas).
Muchos besos, con cariño.

NeverMore dijo...

Pues bien mirado me alegro yo también de escribir cuando me apetece y tengo la necesidad. Escribir por escribir no puede llevar a nada mínimamente interesante. Un post por día. Habrá quien puede. Yo ni me tomo la molestia de forzar ese límite.

Amando Carabias dijo...

maririu
Muchas gracias por tus palabras que alivian en algo, porque, efectivamente un comentario como el de K tan meditado, detallado y cuidadoso se merecía, creo yo, por mi parte una pequeña dedicación.
Es verdad que es probable que no se refiriera a Pavesas y cenizas (éstas son el rastro, la huella de las pavesas, y también están por aquí, porque el tiempo, inexorablemente a medida que enciende unas enfría a las otras) cuando escribió lo del blog propio; pero si acaso no estaba en su intención, alguien podría percibirlo como tal, y he preferido aclarar el asunto.
Creo que cada blog se gestina siempre de modo correcto por su propietario/a. Por tanto no creo que esté mal no contestar las intervenciones. Millones de razones habrá que expliquen y justifiquen tal postura.
Pero, si tengo tiempo -y aún no sé cómo lo saco- me gusta agradecer vuestro esfuerzo. Porque es un esfuerzo acercarse hasta aquí y decir algo. Pienso que se trata de un mínimo de cortesía.
CAP era tres cosas, pero que en nuestro contexto se trata de Club de Amigos de Pavesas.
A veces me sonrojas

Amando Carabias dijo...

Isolda
Estoy convencido de una cosa. Responder a cada comentario, ha supuesto que más de uno se quede entre nosotros. Como estoy convencido de que muchos leen en diagonal mi texto, porque donde quieren entrar es en los comentarios... Y no para leerme a mí, precisametne que debo resultar muy reiterativo.

Amando Carabias dijo...

David:
Bienvenido a este miniespacio. Ya sabes, como repito, que tienes tu lugar reservado siempre que quieras.
Desde luego escribir por escribir sólo lleva a un dolor de cabeza, en el mejor de los casos.
Pero no se nos puede olvidar, a mí no se me olvida, que la inspiración (aquí que cada uno ponga el nombre que le apetezca) sólo suele colaborar si a uno le pilla trabajando.

K dijo...

Me abruma su amabilidad , su disponibilidad al entendimiento cordial... y sólo por eso me gustaría responder a algunas cuestiones que al parecer quedaron mal expuestas y (parcialmente)peor comprendidas.
Lo intentaré pero no sé si llegaré a publicar, porque he caido en un estado de letargia que no me permite escribir como quisiera. Supongo que será cosa pasajera , que el ánimo moverá pie más tarde que temprano,y que volverá otra vez a la superficie para felicitarse de que haya algo como la escritura para reponer fuerzas y no dejarse morir en absurdos malestares .
Por supuesto que al hablar del blog propio como aquel que unicamente reune las características de blog auténtico ,no me refería a ningún blog en particular ,y sí, a todos los que queramos recordar.
Por lo que podemos ver en los diferentes espacios que frecuentamos la autocrítica disgusta y en casi todos ( he dicho "casi" y en ese cuantificador puede incluir de manera felicisima y excluyente el que firma), se evita . Se ve que es más fácil permitirse el calificativo hacia la experiencia ajena que intentar descubrir qué de lo propio sería susceptible de trocar por otra cosa.
No me quedan zapatos para vagabundear más por este mensaje y perderme en naturalezas tan intrincadas como pueden ser aquellas que se dirigen a la manera y modo de hablar y escribir..pero sin extraviar la mente por montañas que puedan llevarme a errar , quiero decir que ,a veces, la escritura no puede decir lo que "parece" sino lo que "es".
No se escribe en estos casos respondiendo a reglas prefijadas en el elaborado y lento espejo de crear ( comprensión , mensaje fácil , agrado..) sino de manera libre e instintiva . Inútil tentativa resulta tratar de contraatacar a la palabra o a la frase para que no salga con su "identidad nata" y la escritura no resulte tan excedida. Ella , la palabra , se da cuenta cuando se la intenta domesticar o se la obliga a seguir fórmulas , y reacciona convirtiendo el texto en una imagen que pierde la naturalidad como punto de referencia. Quiero decir que Vsted escribe divino cuando fluye , independientemente de que su fluir sea liso o con caracola. Es impensable que alguien se ponga a escribir pensando si su mensaje será captado con mayor o menor dificultad o que será una obra perfecta si llega al lector por sí mismo. No hay meditación del lenguaje en Rimbaud , Byron , Lautreamont o Baudelaire o en un prosista como Carpentier. Todo es fluir .
No soy escritor pero me parece que no se escribe como se habla. Nadie va por ahí diciendo " no me quedan zapatos para vagabundear por este mensaje" , ni "me tomaron las nubes de la mano y ajustada a su espalda me llevó rumbo al Norte la luna" ,cuando habla en conversación diaria .
Es complicado de explicar . Concluyo.Pido disculpas si le he llenado el espacio de disparates.

Amando Carabias dijo...

K:
Queda aclarada su postura. Y ya que divagamos sobre asuntos literarios, que tanto me prestan como dirían en Asturias, le indico que nunca he entendido la máxima cervantina a la que me refería en la anterior respuesta, como eliminación de las propias características del escribir, sobre todo a las imágenes (preciosas las que ha puesto aquí, por cierto), sino al estilo, a eso que usted ha dicho del fluir de la prosa de Carpentier, a evitar que las palabras se tropiecen, enreden, trastabillen y caigan.
Que tenga un feliz día.

Meigo, aprendiz de Druida dijo...

Comparto todo lo que dices. Las declaraciones de Munilla, con impresentables. Estamos rodeados de personas poco preparadas en todos los niveles. Hay poca preparación y minima formación. Eso convierte a las personas en servidoras de lago o de alguien. Dea hí que veamos a quienes se disfrazan de escritores para convertirse en servidores y a obispos en cuerda de trasmisión. Yo ya estoy a punto de que me prejubilen y en mi empresa ha pasado lo mismo. Se han recortado delegaciones de funciones, se centraliza más y son muchos los que ocupan puestos, sin una preparación oportuna, que se limitan a ser correas de trasmision. Y ya no hablo de nuestra clase politica, en fin todo es reflejo y consecuencia de lo mismo.
Tienes comparto tu opinión en que Dios no tiene nada que ver con nuestros herrores y barbaridades. Ni en como la naturaleza se comporta. Sin embargo nosotros si tenemos la culpa de no preveer, ni de no gastar dinero con los pobres, ni en otra serie de barbaridades.
Pero es lo que consentimos.
Un abrazo.

Amando Carabias dijo...

Meigo aprendiz de Druida
Lo primero, gracias por el seguimiento.
Lo segundo creo que pretendías colocar este comentario en el piso de arriba, y te has ido un poco más abajo. No importa. Aunque quizá has unido el espíritu de ambos artículos en uno solo...
El caso es que sí cada vez la preparación se hace menor, y además, con tanta información y divulgación como hay por todas partes, se adquieren muchos barnices sin verdader profundización en los temas.
Un abrazo.

FranCCø dijo...

Internet ha conseguido que todos seamos escritores y periodistas. Todo es gratis, accesible y por consiguiente casi siempre de baja calidad.
Todo no lo podemos tener

Amando Carabias dijo...

La Esfera Cultural:
Algo de eso hay, efectivamente. Y es parte de lo que también se denuncia en el texto.
Pero por otra parte, ¿de qué modo se puede dar uno a conocer?
Creo que la calidad, al final llegará a buen puerto.
Gracias por publicarme