viernes, 23 de octubre de 2009

EL PERDEDOR. ENTREGA 3ª




Aquella tarde, por fin, había sido la escena final. Él, muy dado a lo teatral, en los meses previos se la había imaginado como una escena llena de tensión dramática, de lloros, de súplicas, incluso con algún conato de pelea. Los habían tenido por bastante menos. Le entristeció, por aburrido y cobarde, que el sistema utilizado hubiera sido una simple nota, por lo demás lacónica, escueta y fría. Como su relación con él.
“Me voy. No puedo seguir a tu lado. Gracias por todo. Te llamaré uno de estos días”.
Ni siquiera la firmó. ¿Para qué?

Durante unos minutos, deambuló morosamente por la casa. Descubrió que, de ella, sólo quedaba un eco de su nuevo perfume -¿otra prueba?- y algo de ropa, muy poca: vestuario que, de puro antiguo -aunque bien conservado-, era obsoleto, casi para donar a algún museo de la moda. Le hizo gracia su propia ironía.

Ni el más leve rastro de su dinero, ni de sus joyas, ni de sus libros, ni de sus discos, ni de sus tarjetas de crédito, ni de sus enseres de aseo personal. Había aprovechado bien la jornada. Como si no hubiera estado en aquella casa en los últimos diez años. Al menos, no habrá problemas de abogados. No tenían propiedades en común: el piso era de él, el coche de ella, y cada uno tenía su sueldo, y sus cuentas, y otras inversiones bursátiles. Se alegró de no tener hijos. Bendijo en silencio -fue entonces cuando decidió prepararse el güisqui-, aquel temprano aborto, que, tras muchas horas de quirófano, acabó con las posibilidades físicas de que ella volviera a quedar embarazada.

Luego, con el güisqui ya en la mano, se sentó, o se desplomó, en el sofá. La tarde cayó muy rápidamente, también. La noche entró a través de los ventanales del salón, invitada perfecta. Afuera, la ciudad, eran miles de puntos de luz en movimiento, y otros tantos estáticos.

Se extrañó de su impavidez. No estaba triste. Tampoco dolido. No se percibía herido en el honor. Ni su orgullo de macho sufrió un ápice. Pero tampoco se sintió liberado, o con deseos de recuperar lo que él había sentido como suyo en los últimos quince años -siempre incluía en sus cuentas los cinco años de noviazgo, sin duda, los más hermosos vividos junto a ella-. Si acaso, estaba decepcionado consigo mismo. Decepcionado por no haber previsto antes lo que le estaba sucediendo. Mejor dicho, decepcionado por no haber hecho caso a su intuición, que con voz lejana, pero nítida y clara, le avisaba de lo que ocurría.

De pronto, se dio cuenta de que era libre. A partir de ese momento, podía actuar como le viniera en gana, sin disimulos, sin tener que dar cuenta a nadie. Y al mismo tiempo decidió todo: que tenía hambre, que tenía sed, y que debía beberse la vida, todo lo que ésta le ofreciese.

Con frenesí, se desvistió su aburrido terno de oficina y buscó otra ropa. Tras una ducha, se atavió lo más elegante y alegre que pudo, sin llegar a ser hortera -o eso creyó-. Se decidió por un restaurante de calidad. Supuso, con razón, que aquel día de la semana -un miércoles- no tendría problemas para encontrar una mesa libre. Tras la cena -la más opípara de los últimos años-, decidió acudir al casino de la ciudad.

49 comentarios:

Gaspard dijo...

Que tenga cuidado nuestro pobre amigo, porque la libertad a veces, tras la primera alegría, nos deja en el vacío. Recordemos 'Cadena perpetua', con Tim Robbins y Morgan Freeman. El primero de los viejos se suicidó. Anda que yo también, comparando el matrimonio con la cárcel...
Buenas noches

Isolda Wagner dijo...

Pues eso digo yo, Gaspard, que no es para tanto!
Pero es cierto, si empieza por ponerse guapo y salir a cenar la noche en que su mujer le deja, mal empezamos.
A todo hay que acostumbrarse, pero no de golpe, mejor asimilar las derrotas y resurgir poquito a poco.

¿Qué tal Brahms ayer?

Amando, por dónde nos va a salir este personaje?

Besos sinceros, como el prota, porque otra cosa no será, pero honesto consigo mismo, sí.

María A. dijo...

¿Beberse la vida?...Cena opípara, casino... A mí me da que se va a perder... Es carne de cañón...
Abrazos africanos...

Tempero dijo...

Lo siento, Amando, siempre voy a las puertas que dejas abiertas. Ansias por saber, cuando ella le llame, si es que le llama, lo poco o lo mucho que le dirá y en qué sentido.

Creo que no le llamará, de momento.

¿Te gusta mucho el verbo 'bendecir'?

Saludos.

Amando Carabias dijo...

Gaspard:
El matrimonio es como todo en esta vida, quienes aciertan encuentran el paraíso, quien se equivoca el infierno. Entre una y otra situación, tantas variables como personas y acontecimientos... Aquello del yo y las circunstancias.

Amando Carabias dijo...

Isolda:
Es que algunos se lo toman todo a la tremenda.
Saldrá... Quizá ni salga.

Amando Carabias dijo...

Los blogs de blogger han estado fuera de órbita casi dos horas, a mí me han dejado con la palabra en la boca, o en los dedos... Sigo

Amando Carabias dijo...

María A
De cañón o cualquier otro tipo de armamento pesado.

Amando Carabias dijo...

Tempero
Se descubre tu innata curiosidad, esa que te define. Tú mismo respondes a la primera...
Sí, la palabra bendecir me encanta, y más que la palabra, ponerla en práctica... Y no me refiero al gesto sacerdotal, sino al contenido semántico... Decir bien de algo, pero sobre todo de alguien creo que es no sólo bueno, sino necesario hoy mismo...
¿Por qué no esforzarse en buscar lo mejor de cada quien?

Pilar dijo...

!Vaya matrimonio, madre!No sé cómo con esos comportamientos compulsivos pudieron durar 15 años (y yo creí que eran diez, no sé porqué).
Voy a juzgar, y eso que no me va nada.
A ver.
Ella, para nota, vaya. Se va, le deja una frígida nota y si te he visto no me acuerdo. Ni el ama de llaves de Rebeca.Patológico.
El, para nota, too. En el primer relato está destrozado, y en el tercero ya se va de fiestorro. ¿Que hará en el cuarto? ¿Sodoma y Gomorra?
Mi final: Ella se ha ido porque le ama tanto que no quiere que sufra su muerte anunciada y prematura, pues padece un cáncer de mama terminal. El, después de quemarse a lo bonzo Madrid (O Euritmia) día sí y noche también a la salud de su "mala mujer", se entera de la verdad, y muy arrepentido de haber desconfiado se quita la vida bebiendo cicuta, como Sócrates.
Pepe...pon un poco de grasia sevillana (genial tu correo)que llega el finde...y te echo muchísimo de meno, quillo.
Amando, no uses la palabra traición que suena a San Pedro negando a Cristo, porfa.
Esperamos el desarrollo y posterior resolución del conflicto.
Besos pacificadores
Pilar en su Pecera (hoy rosa)

maria cugat dijo...

Hay algo de alivio, de liberación, en el acicalarse ...

Amando Carabias dijo...

Pilar:
Aclaración: 15 años porque nuestro hombre cuenta los cinco de noviazgo, maravillosos según nos dice el narrador.
En el primer capítulo tampoco es que estuviera destrozado, simplemente analiza con frialdad casi de cirujano de su alma lo ocurrido. Creo que simplemente ha esperado a que se consume lo que él ya sabía que ocurría.
¿Ella, ella...? pues no sé casi nada de ella. Estuvo y se fue, pero creo que será más feliz que con él. Casi seguro.
Quizá la llame algún día.
Hablamos de traición, pero en el fondo, como él piensa: "Se extrañó de su impavidez. No estaba triste. Tampoco dolido. No se percibía herido en el honor. Ni su orgullo de macho sufrió un ápice. Pero tampoco se sintió liberado, o con deseos de recuperar lo que él había sentido como suyo en los últimos quince años -siempre incluía en sus cuentas los cinco años de noviazgo, sin duda, los más hermosos vividos junto a ella-. Si acaso, estaba decepcionado consigo mismo. Decepcionado por no haber previsto antes lo que le estaba sucediendo. Mejor dicho, decepcionado por no haber hecho caso a su intuición, que con voz lejana, pero nítida y clara, le avisaba de lo que ocurría".


Del resto de los comentarios diremos continuará...

Pilar dijo...

Creo que a partir de hoy voy a firmar en el blog como María Pilar.

Amando Carabias dijo...

maririu
No sé si un alivio, al menos una expectatitiva.

Amando Carabias dijo...

Pilar/ María Pilar
Naturalidad y creatividad.

Pilar dijo...

No, si lo digo porque como hay tantas Marías, por no ser menos.Si hasta tu te apellidas María.
Ay, Jesús.

Flamenco Rojo dijo...

Yo pensaba que la tristeza y el dolor eran los sentimientos que más debe paralizar a la pareja en una ruptura sentimental, pero por lo que veo este tío se lo va a plantear de otra manera ¿no?

Un abrazote.

Flamenco Rojo dijo...

Con permiso de Amando y por ser hoy viernes ahí va un chistecillo, verde claro eh, que un día le escuché al difunto humorista sevillano Paco Gandía:

Un marido, más o menos como el del relato, llegó a su casa y se encuentra a su esposa sudando, más colorá que un tomate, y vestida con tan solo un picardía. Obviamente se mosquea y empieza a mirar alrededor... la cama esta deshecha... hay un bulto tras las cortinas... debajo de ese bulto hay un par de pies...
Así que aparta las cortinas de golpe y, efectivamente, allí detrás hay un tío en pelotas.

-¿Quién es usted? Pregunta el marido, más cabreao que un pavo en navidad.

-Eh... pues... soy el exterminador... yo... estaba... haciendo la inspección... de polillas, si si eso es, estaba comprobando si había polillas en esta casa.

-¿Y por qué está usted desnudo?

-¿Desnudo yo? ! Cielos, estas polillas son peores de lo que yo pensaba !

Amando Carabias dijo...

Pilar/ María Pilar:
El blog de las Marías...., que no de Marías... Bueno ya me he liado.

Amando Carabias dijo...

Pepe Gonce (María)
Todas las apariencias engañan todas... Las de los maridos liberados... y la de los pobres sufridores que se enfrentan contra una terrible plaga de polillas. O es que se trata de otra cosa????

Flamenco Rojo dijo...

Polillas Amando, polillas...no seas mal pensao.

Isolda Wagner dijo...

A ver Sirenita, no te basta con tu nombre? Otra María no, por favor. Bastante lío hay ya y luego pasa lo que pasa.
Por cierto, alguien sabe algo de Catherine?. Simple asociacion de ideas.
Pepe, nadie dudó de que fueran polillas, además éstos siempre fueron sucesos verídicos de verdad de la buena.

Besos a los que proponen la risa.

Hortensia dijo...

Si firmar como María, plantea problemas o líos, no quiero ser yo la culpable... Hortensia, a partir de ahora firmaré como Hortensia, aunque ese no sea mi nombre...Abrazos africanos. Hortensia.

maririu dijo...

Cathérine tiene a su nieto que además empieza vacaciones, a su perro Sultan le operaron y además recoge las nueces de.. pues no sé de onde de su vergel supongo, Las nueces del Dauphiné, capital Grenoble son famosa o sea muy buenas.
Que aparezca mi nombre en lugar de mi apodo Pilar son bromas de los typis que últimamente me trae el Papa Internet.

Pepe yo conocía dos este será el tercero.

1) la mujer en la cama bien tapadita con un bulto al lado:

el marido destapa y: "¿quién es ése?" gesto de darle.

la mujer: "cuidado Pepe, has de saber que es el que paga la hipoteca, los gastos del coche y que me regaló el abrigo de pieles."

el marido: "tápale no vaya a ser que se resfríe"

2) se oye llegar al marido
la mujer al amante "tirate por la ventana"
el amante : "pero Tristana que estamos el piso nº 13"
la mujer: "no es momento de supersticiones, por favor"

feliz velada

Amando Carabias dijo...

Isolda:
Se me ha adelantado maririu por unos instantes.
Así que duda resuelta.

Amando Carabias dijo...

María A:
No, qué va a plantear un problema. Al contrario. Se trata más bien de que ella se quiere sumar a la belleza del nombre de María.

Amando Carabias dijo...

maririu
Gracias por la aclaración...
De los chistes, pues hoy y ayer que el tema de la infidelidad está presente, la verdad es que es una forma de ponerle otro prisma. El primero me gusta más que el segundo... ¿Y no es también una especie de microrrelato? Bueno en realidad los tres chistes que habéis contado. Aunque nos hagan gracia y nos hagan sonreír o reír...

Beatriz Ruiz dijo...

"Lo que él había sentido como suyo en los últimos quince años"???... Ufffff... no me gusta nada este sentimiento. Pero tengo que reconocer que la manera rápida de resolver sí...

Yo a partir de ahora entonces quiero llamarme: Beatriz María del Pilar... A que mola???... Es la realidad, así me llamo... No era un concurso, no???...

Os costará creerlo, pero me he equivocado de día... salgo el domingo, no mañana... Últimamente me visita con frecuencia el amigo alemán, o son los años???...

Buenas noches... besitos...

Amando Carabias dijo...

Beatriz María del Pilar:
Pues ten cuidado con el cambio de hora, a ver si pierdes el avión por eso... :). Ni nombres al amigo alemán, que es un mal amigo. Ni siquiera los años... Lo raro es que sepas dónde está, yo, al menos, con semejante ajetreo estaría perdido...

El sentimiento expresado por el protagonista, efectivamente, no es nada maravilloso, pero es uno de los más frecuentes. No sé si se trata de educación o de costumbre, el caso que los limites entre amor y posesión en demasiadas ocasiones se hacen casi inexistentes. Y ese es uno de los grandes errores del ser humano como especie.
Me parece a mí.

Pilar dijo...

Shhhhhh...
Dulces sueños, Pavesas.

http://www.youtube.com/watch?v=Nc9nrTtdLcw

Flamenco Rojo dijo...

http://www.youtube.com/watch?v=cFyAWxEE6YU

Flamenco Rojo dijo...

y

http://www.youtube.com/watch?v=cpd68E07rMg

Amando Carabias dijo...

De parte de Pepe Gonce, 1

Amando Carabias dijo...

De parte de Pepe Gonce, 2

Isolda Wagner dijo...

María A. (para mi la del dúo de la africana) Ya se que no es así y que tienes un segundo nombre precioso, mucho más bonito incluso, que las hortensias. Así que si te parece bien, al menos a mí me gusta tu nombre como está.

Conque Beatriz, María del Pilar, eh? Pues te gano por goleada, pero no los revelaré, ¿cómo era aquello ¡antes muerta que sencilla!

Besos a las dos que vais a coincidir en Africa. Buen viaje Beariz!

Amando Carabias dijo...

Isolda:
Y eso que en este relato no hay nombres...

Pilar dijo...

Pepe, ¿te he dicho que te quiero?

Pues eso.

A todos.

Que me llamo así: María del Pilar Francisca Murias Martín Esquivias Serrano

Y me voy a ver "El gran Torino".


Javier, como lo digas te mato, y a ti Ratoncita, que ya lo sabes, ni mencionarlo en la máquina.

Amando Carabias dijo...

Pilar...
Si supieras cuántos ojos miran.
Cuando vuelvas, o mañana, si pinchas en la etiqueta cine de etiquetas, te encontrarás con un comentario mío de la peli.
Ya me dirás.

Amando Carabias dijo...

Más fácil: Gran Torino

Hortensia M.A. dijo...

Amando, Isolda, Pilar, tranquilos, Hortensia no me llamo, pero en otros tiempos era mi nombre de ligoteo... A mí me dan igual estas cosas y es cierto que María predomina y se presta a confusiones... Creo que es el nombre dominante de algunas generaciones,antes de las Tamaras, Vanessas, etc. Mis padres, como tenían un chiquillo/a cada año, no se complicaban la vida: las chicas (4) todas María...algo...Menos mal que no miraban el santoral pues creo que me hubiera tocado Dominga... Claro que a mis 10 o 12 años me entró la tontería de cambiar de nombre y no sé si fué cuando la confirmación, pero yo decía que quería llamarme Mª Jesús. Mi madre, que tiene mi mismo nombre, pero sin Mª, lo tomó fatal y me recordó que nos llamábamos así por una bisabuela, ahijada de una sobrina bastarda de Alfonso XII, con el mismo nombre...Aunque no la creí, Ese toque de realeza bastarda, acabó con mis intenciones de cambiar el nombre. Muchos años después en los archivos del obispado, descubrí que lo que me había contado mi madre ¡era verdad!!! Y hasta he heredado un regalo de bodas que le hizo a mi bisabuela... Conmigo se queda pues ya no hay nadie más en la familia que así se llame... Enfin, esa es la historia...Abrazos africanos.

Isolda Wagner dijo...

María A. Así se las ponían a Felipe II. Revelaré uno de mis cuatro nombres, adivina: el que tu querías. Y no miento.
Claro que donde esté el de la bisabuela bastarda...

Besos a secas, que tanto nombre empacha.

maririu dijo...

a mí me tocaba María del Carmen, como mi madrina y mi abuela, mi madre se llamaba María de la Cinta como una tortosina por familia y generación. Todos la llamaban Cinteta, pero mi padre (su madre se llamaba Cinta también) la llamaba María y cuando fue al registro civil a declararme me puso María a secas no una virgen de... María punto y aparte.
me voy a dormir que no pueo con mi arma

Amando Carabias dijo...

María A:
Curiosa historia. El caso es que en más de una ocasión he oído hablar de intentos de cambio de nombres, pero por alguna razón, es algo que se complica siempre mucho, es casi como si nos convirtieran en otro.
A mí por ejemplo, y esto sonará quizá snob, siempre me encantó mi nombre. Era imposible que me pareciera extraño, puesto que lo heredé de mi padre, y lo que más extrañaba es que les extrañara a los demás.
Por cierto, es mi único nombre.

Amando Carabias dijo...

Isolda:
Te digo lo que decía a Pilar a las 22.15. Ya sé que es un poco igual, pero bueno, simplemente lo digo.

Amando Carabias dijo...

maririu
Quizá este comenario lo leas junto con los versos del poema de mañana.
María, simplemente María, es el nombre de la Virgen, por eso le llevan todas las vírgenes. De todos modos,María Cinta me parece muy bonito... al menos en el sentido en que a mí me parecen bonitos algunos nombres.
Quizá algún personaje que salga de mis dedos haya sido anotado en el Registro Civil como María Cinta, y cuando niña fue llamada Cinteta y su mejor amiga era otra niña llamada Hortensia que quería cambiar su nombre por el de Pilar...
Bueno que me lío.

Marina Filgueira dijo...

Hola Amando y contertulios. Creo que ha hecho bien el hombre, que otra cosa ¿ponerse a llorar noches enteras? Eso ya lo hizo uno de mis hijos y acabó en depresión severa, en estos casos suele hundirse más el barón que la mujer, por lo regular ella sale más adelante que él. Un beso a todos vosotros/as. Es un placer laeeros

Gaspard dijo...

Tatatachán, je suis ici!, 24 horas después. He estado viendo la Feria Internacional de Arte Contemporáneo. Cuántas cosas bonitas, pero ¿dónde metes los libros? Imposible. Me preguntaba Isolda lo del concierto de esta noche. Extraordinaire! Si a Amando le gusta Brahms, por algo será. Y antes de volver a casa he pasado por la Torre. ¿Habéis visto la iluminación? Pura maravillosa como Sevilla. Enciendo la tele y están con caricaturistas del presidente, ya sabéis que está la cosa revuelta con el "marcha atrás" del Dauphine. Sarkozy sí que sabe de abandonos familiares, y allí está, acicalado.
Esperando la próxima entrega tras la cena -una película sublime, como 'Gran Torino' es 'La cena de los idiotas'- se despide de ustedes servidor.
Buenas noches, caballer@s.

Amando Carabias dijo...

Marina Fligueira:
Pues en el fondo tienes razón, cuando algo ha acabado, mejor no rumiarlo mucho que acaba por pudrirse...
Pero ya veremos en que acaba tanto vuelo tan rápido y tan repentino...

Amando Carabias dijo...

Gaspard
¿Me dejará la técnica...?
Te decía que me encanta leerte de tan buen humor. Desde luego la velada tiene la pinta de haber sido una maravilla.
Gracias por lo de Brahms. Me ruboriza un poco.
Sí, otra gran película... que no he visto... ¡Qué desastre, el mío!