domingo, 13 de septiembre de 2009

LLANTO DE PIANO

La palabra de cada día 2005.
El camino que serpea.
Enero
Llanto de piano que, a pesar de la compañía de la orquesta, deambula entre triste y solitario, apesadumbrado y melancólico, sorprendido y dubitativo. Las lágrimas de la música que estremece o inquieta brevemente las ondas de la habitación adensada de vacíos interminables, aunque, en el fondo, atractivos o, al menos, tranquilizadores. A lo lejos, sobre el peralte inclinado de la última curva del recorrido de mis neuronas, un recuerdo, o el atisbo de un recuerdo, de la adolescencia, quizá de la infancia, que pugna por romper la barrera inexpugnable del tiempo ido, ése que es más inalcanzable que el futuro mismo, pues al futuro podemos aspirar a llegar, sin embargo al pasado es imposible retornar, aunque haya muchos que se empeñen en lo contrario. Una sonrisa lanzada al infinito del futuro que, sin embargo, ahora es casi pretérito. Todo quedó en afán inconcluso, en sueño desvaído, como de remembranza, de confuso color sepia. Lo que ayer (hace más de veinte años) era una ilusión, hoy es pasado, igualmente inalcanzable, o más inalcanzable como digo, aunque se haya vivido.
Así pasa la vida, dejando crisálidas cristalizadas en las cunetas del tictac de los relojes impávidos. Miramos/miro casi siempre hacia delante, acaso excesivamente lejos. Únicamente columbro o alufro siluetas ingrávidas que no distingo ni matizo ni concreto; pero cuando llego, por fin, a su altura, no las reconozco y sigo columbrando o alufrando en lontananza, continúo confundiendo lo que está junto a mí, con lo que todavía no ha llegado pues está más allá, mucho más lejos. Y dejo pasar mi tiempo, el que me corresponde, jaleándolo de improbables quimeras, de hermosos futuribles indemostrables...
El frío, quizá excesivo incluso para ser enero, se agolpa tras los sucios vanos de las acristalados de las ventanas. Viajo, a lomos de hermosas melodías flébiles y quejumbrosas, hacia países de mi propia memoria fantasmal y agónica; hay periplos que únicamente conducen a la desolación, al testimonio de la nada, de que la mayoría de las cosas son penosos ejercicios, mal ejecutados, por este torpe prestidigitador que escucha las hermosas melodías melancólicas.
Estoy convencido, a pesar de todo lo que me digan, que sólo el hombre que sufre, y que es capaz de sacar conclusiones de su sufrimiento madura. Es verdad que las cosas no son más fáciles por ello, ni siquiera se garantiza la tranquilidad en un momento determinado, aunque éste aparezca alejado del presente; pero sí se garantiza el mínimo de tranquilidad para arrostrar las dificultades que se presenten a continuación. En el fondo, la vida es saber sortear las penalidades con las que nos topamos. No hay otra manera posible de vivirla. Si esto no se entiende, si esto no se practica, el primer gran escollo que ocupe el ancho de nuestro sendero será suficiente para apartarnos de él definitivamente. Con lo perjudicial que ello pueda ser. Pues, si lo que hacemos es, en vez de superarlo, buscar otra senda (aunque avance en la misma dirección), acabaremos caminando por el camino distinto al nuestro. Ahí, probablemente, tengan principio muchos de los problemas que hoy asolan a buena parte de la sociedad. Nadie nos ha enseñado dos cosas fundamentales: descubrir nuestro camino y el mejor sistema de limpieza de la vereda de los innumerables obstáculos que muchas veces la hacen impracticable.

26 comentarios:

Flamenco Rojo dijo...

“Una sonrisa lanzada al infinito del futuro que, sin embargo, ahora es casi pretérito”… “En el fondo, la vida es saber sortear las penalidades con las que nos topamos”…. Como estos dos pensamientos filosóficos modernos podría destacar algunos más, pero eso, lo dejo para otros amig@s.

Abrazos.

Amando Carabias dijo...

Recuerdo que se ha publicado el cápítulo V de Mañana amanecerá.
desde aquí se accede.
Gracias.

Amando Carabias dijo...

Pepe Gonce:
¿Filosóficos?
Yo me quedaría en otro nivel, más parecido al de la experiencia, a la constatación de hechos que se repiten.

Pilar dijo...

Buenos, soleados e iluminados días.
Primero de todo, perdona por el laconismo de mi onomatopeya-comentario de ayer, pero me estaban jaleando para salir, y entre las prisas, y la ganas de ponerte en pocas palabras lo que me hizo pensar tu poema, creí que con ese absurdo Ay! resumiría lo que me provocó. Disculpa si pareció ridículo, lo puse con mi mejor intención, pero hoy lo leo y me parece algo tonto.
El post de hoy, sí que es Amando 100% (con neurona incluida), con sus adjetivos imposibles, epitetos maravillosos y poesía entreverada.
¿Enero ya?, deja, deja, queda mucho para llegar allí, aunque nos acompañe la música, por supuesto.
Pasado, presente, futuro...¿Y que somos los mortales sino un compendio de esos tres sustantivos? Eso es vida, señor mío, y la vida es sólo una, hay que ver el halo que nos envuelve y que nos hace ser cómo somos.Aceptarnos y aceptar todo lo que esa pantalla panorámica nos muestra día a día. Pero yo, querídisimo mío, quiero ser Scarlett en Tara , la protagonista, la dueña del papel principal, la que dirija su vida, con sus felicidades fragmentadas y sus tremendos golpes.Pero siempre llevando las riendas de mi coche de caballos, mientras atrás arde Atlanta.
Obstáculos. Problemas. Dolor. Sorpresas. Y también sobresaltos.
Saber seguir, siempre seguir, con valentía.
Tú, yo, y muchos sabemos de ello. Y alguna compañera nuestra que se bebió conmigo en un cabaret de Barna una ( ¿o fueron dos?) botella de cava.
Vaya por ella y por su regreso sana y salva, tu comentario de hoy (si te parece bien).
Kisses going with the wind.
Scarlett.

Amando Carabias dijo...

Pilar
Por el final empiezo: Por supuesto que acepto esa dedicatoria de esta entrada para nuestra común compañera.
Respecto de tu laconismo onomatopéyico de ayer, a mí me pareció, como te dije, un buen resumen del modo en que recibiste los versos. Y, créeme, algo así es la primera reacción que se necesita.
No temas, ese enero es de 2005, ya hemos pasado otros tres...
(Un secreto, al releer el texto antes de publicarlo, la palabra neuronas rebotó en ellas y me dije, ya verás Pilar... Dudé, pensé... sonreí y dejéla)

Pilar dijo...

Pues yo déjote este mix tan sorprendente, para uso y disfrute de los asiduos al blog, los transeuntes y los adictos.Que no falte un piano, oiga.

http://www.youtube.com/watch?v=R71TuZUq0rA&feature=fvsr

Buen domingo ( y esperaré el cuarto enero, aunque me temo que será como los otros TRES ).

Flamenco Rojo dijo...

Amigo Amando, yo añadiría una tercera cosa que nadie nos ha contado. Nos han enseñado a celebrar los éxitos y aprender de los errores, pero nadie nos ha enseñado a disfrutar del camino.

Feliz domingo.

Liszt, siempre Liszt.

Ahí va mi réplica Pilar, otro llanto de piano:
http://www.youtube.com/watch?v=u7TUYgHQTTE

Ferran dijo...

Amando: creo que cometí una incorrección (y la he cometido más de una vez) colocando poemas míos en un blog tuyo, aunque se trate de variaciones. No han dejado de verlo así, y expresarlo con un respetuoso silencio, como si no existiera intercambio alguno de "patio común", la mayor parte de los contertulios. Te pido disculpas por ello y se las pido a quienes, con toda lógica, han entendido que sólo te corresponde a ti escribir textos literarios o poemas.

Pilar dijo...

Pepe. !Qué bonito!.Muchas gracias.Menos mal que vivió para componer la novena.El texto es el mejor complemento al post de Amando de hoy.Sólo faltaba la luna.
Un abrazo fortísimo.

Flamenco Rojo dijo...

Ferran, aunque estoy seguro que el escribidor ta va mete una bronca del "10" por las excusas que pides arriba, por lo que a mi respecta no solo no me importa, al contrario me encantan. Seguro que si buscara en otras entradas similares encontraríamos algún comentario mío al respecto de tus variaciones diciendo lo bueno de ellos.

Ferran dijo...

Gónce, eres la excepción de una regla que se ha mantenido en TODAS las intervenciones, en cada ocasión en la que he escrito algo que, obviamente, corresponde a labor de un post. Yo creía, y posiblemente estababa equivocado, pero por la forma en que entraban comentando cosas de los demás otras personas, que aquí podíamos descargar aportaciones y que no se trataba de un diálogo a dos bandas. Eso se ha demostrado todos los días, cuando la gente ha ido hablando de forma paralela: a veces todos, a veces de dos en dos, a veces con Amando. me ha extrañado y, en especial, porque se reitera en personas muy concretas a las que, sin duda, molesta que se depositen cosas propias cuando sólo se pide comentar el post de Amando.

Te reitero mi agradecimiento a tus comentarios sobre aquello que siempre fue pensado como aportación en una rueda de amigos. Como el formato es otro, se trata de atenerse a lo que hacen las demás personas.

Lo lamento mucho y cualquiera puede responderme que me monte mi propio espacio. Y es posible que tengan razón y que yo esté equivocado con respecto a las normas de éste. Incluyendo a quienes ni siquiera me han nombrado una sola vez. Ni para responder a un comentario dedicado a ellas.

Amando Carabias dijo...

De parte de Pepe

Amando Carabias dijo...

Pilar:
El cuarto enero será el cuarto enero no lo dudes. Quizá sea igual, o quizá no. Cada día tiene su propio afán.
Gracias, de nuevo, por tu aportación musical.

Amando Carabias dijo...

Pepe Gonce:
Me parece que tienes toda la razón. Es como si sólo contara alcanzar el logro, como si el modo de hacerlo no contase. Y disfrutar de la vida o de lo que hacemos es, probablemente, el mejor camino para llegar a ese éxito del que hablas.
Como no, también muchas gracias por tu ilustración musical...

Amando Carabias dijo...

Ferran:
Queridísimo amigo, siempre he dicho que tu generosidad para con este blog me deja boquiabierto. Pienso que no merezco, por tantas razones, ese esfuerzo que sin duda es titánico por tu parte.
En algún lugar contesté a otra contertulia que tal y como lo imagino este Pavesas y cenizas se ha convertido en una brasserie en donde se producen muchas situaciones en general de buen tono. Y donde vale el comentario al hilo de la entrada que se me haya ocurrido, o se deriva hacia otras propuestas que sin duda son más apatecibles para los contertulios habituales.
Respecto de los poemas yo diría, si te sirve de algo, que me parece que exageras. En absoluto pienso que tengas que silenciar tus aportaciones, tu visión sobre el poema. A mí, al menos, ni se me ha pasado por la imaginación que tus versos no tengan por qué no estar junto a los que a mí se me ocurren.
También sabes, mejor que yo seguramente, que comentar poesía no es sencillo, que es necesario una costumbre en la lectura, una especie de rutina en su degustación.
Además, y no citaré nombres, quienes junto a ti normalmente comentan mis versos, estos días andan con más líos o con problemas técnicos.
Por otro lado, como bien señalas, no todos los comentarios suponen la intervención de todo el mundo. E incluso, si has observado, ya hay diálogos entre vosotros a los que sólo asisto con una sonrisa en la generalidad de los casos.
Si es por mí (y en este caso permíteme que recuerde que el propietario del blog soy yo), a mí no es que no me moleste, sino que me encantan tus versos. Muchos amigos no saben que empezaron a producirse estas colaboraciones con el primer relato por entregas, el de La Sombra y se hicieron casi habituales con el de El Espejo.
Te diría una cosa, como siempre hago: actúa con naturalidad, y eso implica dos cosas en este caso: la obvia, o sea, hacer lo que te pida el cuerpo y la otra no preocuparte de los demás, de su respuesta o de su silencio (me refiero a los poemas). Además, como bien sabes, pues al fin poeta eres, no todos los poemas llegan al corazón de los lectores del mismo modo.
Un abrazo afectuoso.

Anónimo dijo...

Primero agradecer tus amistosas palabras en el blog Neuroscopetrix. Un placer haber llegado hasta aquí.
Pareciera que los pianos siempre conceden lamentos. No nos pueden enseñar todo; de lo contrario las decepciones lo serían menos y los éxitos pasarían a ser meros premios. C'est la vie!

Amando Carabias dijo...

Neuroscopetrix:
Bienvenida a este pequeño rincón.
Cuánta razón tienes en la relatividad de las cosas. No sé si Einstein se refería a esto, creo que no, pero desde luego está bien que nos atemperen los éxitos y nos desdramaticen los fracasos, aunque 'sólo' sea con la melodía de un piano.

María A. dijo...

Si esto es una brasserie... dada la generosidad del dueño de la misma, creo Ferran que no debes sentirte mal.. Yo os agradezco a ambos que nos permitáis a los demás compartir todo lo bueno y bonito que escribís, porque, al menos a mí, me enriquece y me enseña. Y si al bueno de Amando no le importa, pues que así sea...
Amando, yo miro siempre hacia adelante...aunque procuro mantener el recuerdo; revisar el pasado, sobre todo para no olvidar nunca de donde vengo ni a quien debo lo que soy o intento ser...
Y lanzo una sonrisa al futuro inmediato, la mejor de mis sonrisas.
¿Quién dijo que el domingo se descansaba? ¡Es mentira! Ya estoy inquieta con la llegada de mis nuevos alumnos/as, las clases...el próximo martes...Una sonrisa más.
Goncé, si el Ramadán acaba el viernes...el lunes estoy en Sevilla un ratito. Besos africanos, hoy con tormenta que prometía y se quedó en agua de borrajas.

Amando Carabias dijo...

María A:
Pues mi hija no está nada nerviosa ni inquieta por empezar el curso. Casi que le fastidia.
Quizá por ello llevo un diario, algo tan trasnochado en apariencia, porque es un modo de reflexionar, casi de vivir dos veces y así no repetir los mismos errores y así prepararse para mirar el futuro, empezando por mañana, con la mejor de las sonrisas.
Aquí, esta tarde durante unos minutillos, chaparreó, como si el agua le pesara mucho a una nube. Y apenas regó la calle. Al menos hemos recordado lo que es una llovizna.
Refresca.

Flamenco Rojo dijo...

María, si apareces por Sevilla, me avisas y a ver si quedamos para tomar un cafelito.

catherine dijo...

llegue deTortosa a las siete. Fuimos a pasear unmomemtito, pués algunas llamadas, la cena y a leeros con mocho placer. Leí soló la entrada y los comentararios. Otro día os contaré la estancia estupenda en el delt

catherine dijo...

Escribo con el ordenador de mi hija, un Apple que me molesta mucho. No logro corregir mis errores y escribo sin diccionario,¡. yo que pensaba que con los qccentos y eñes sería mejor

catherine dijo...

bueno me voy a parar que es un horror. Os mando un abrazo muy fuerte y sigo leyendo las entradas anteriores durante que mi hija y los chicos ya duermen.

Amando Carabias dijo...

Catherine:
Bienvenida nuevamente, espero que lo hayas pasado formidable.

Maria Sangüesa dijo...

Hay veces, Amando, que los obstáculos del camino, o de la vereda, son tantos que en lugar de limpiarlos habría que saltar sobre ellos para poder seguir hacia delante...así se procura no volver hacia atrás, para no encontrarlos de nuevo.
A mí me gusta mucho todo lo que escribe Ferrán, y disfruto con vuestros coloquios de amigos,pues aunque no deje comentarios me siento parte de cuanto decís.
Preciosos los regalos de parte de Pilar y de Gonce. Muchos besos para todos.

Amando Carabias dijo...

María Sangüesa:
Realmente este fragmento tiene una continuación, algo que seguía escribiendo aquella noche y que no me ha parecido oportuno traer aquí y ahora. La conclusión a la que se llega en la continuación es que me propongo hacer lo que dices: salto sobre ellos y continúo. Pero hay veces también que más que saltar hay que escalar, y eso requiere tiempo. Pero todo llegará.
Hablo por mí, y seguro que Ferran opinará igual: nuestras conversaciones son ampliables a más interlocutores. Esto dicho con el total y absoluto respteto a tu libertad, sólo faltaba.